"A veces pasan unos meses, me descuido y vuelve a estar todo flojito. Y eso me pasa cada vez más rápido. Antes era al revés: por ahí quería ir a la playa el fin de semana o tenía que hacer unas fotos para una revista. Entonces, me cuidaba un par de días y ya adelgazaba tres kilos. Pero ahora, para bajar ese exceso del invierno, tengo que luchar un mes", relató.