Digitalización de los negocios por pandemia favorece a la administración tributaria

Para el economista y exjefe de Sunat, Luis Arias Minaya, el proceso de transformación digital sí puede dar buenos resultados, pero no de manera inmediata y dentro de todos esos cambios, lo más importante va a ser la facturación electrónica, que permita determinar casos de evasión tributaria.

“En facturación electrónica, ya se avanzó hasta los 500 mil contribuyentes, pero estamos hablando de varios millones de contribuyentes pequeños con los que se debería continuar avanzando. Inclusive que, en el futuro, las declaraciones sean totalmente automatizadas. Es decir, como en las personas naturales, que llegan casi hechas y solamente se envía”, explicó.

Consideró que un esfuerzo de este tipo permitirá que los contribuyentes puedan eliminar registros de ventas y compras sin problemas, pero sus efectos no se verán al 2021, sino dentro de los próximos años porque se trata de una medida de mediano plazo.

En ese sentido, Dante Sanguinetti, socio del Estudio Philippi Prietocarrizosa Ferrero DU & Uría, comentó que, aunque las medidas no tengan un impacto inmediato, esta transformación digital sí debe acelerarse, en vista de que la pandemia ha generado en los negocios una necesidad de digitalizarse.

“Ahora que la economía no permite que haya un incremento de impuestos, es la alternativa que se tiene. Con lo lamentable que ha sido esta situación, en digitalización se ha avanzado lo que se pensaba hacer en 10 años, así que eso debería aprovecharse. Hoy en día existe una necesidad de digitalizarse y bancarizarse”, comentó.

También se mostró a favor de la implementación de una cuenta única tributaria que le permita a Sunat gestionar de manera centralizada todas las cuentas de los contribuyentes, desde personas naturales, jurídicas, el Impuesto a la Renta, IGV y tributos aduaneros. Agregó que muchos países ya vienen trabajando con estas cuentas únicas con resultados positivos.

“Además de facilitar la gestión simplificada de los contribuyentes, se permitirá el diseño de políticas tributarias basados en conceptos como: gestión de riesgos sobre la base del comportamiento, simplificación de procedimientos al unificar la situación del contribuyente en una sola consulta, automatización y simplificación de las obligaciones”, indicó.