Según el doctor Rafael Aguilar, investigador del proyecto, la industria de la construcción contamina el ambiente hasta en un 30% debido al uso de materiales como el cemento, el acero o el ladrillo. El cemento es el material más utilizado para la construcción a nivel mundial y uno de los más contaminantes porque su proceso de producción es fuente de emisión del dióxido de carbono (C02).