Alianza del Pacífico trae retos en desarrollo que Perú debe alcanzar

La Alianza del Pacífico es la iniciativa de México, Perú, Colombia y Chile para integrar sus economías en un trabajo conjunto entre gobiernos y empresarios para así fomentar el desarrollo de sus sectores económicos, mejorar su posición comercial e incrementar su atractivo para los inversionistas.

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Se sostiene que la vía más efectiva para ello es emprender esfuerzos como bloque. Si se tratara al bloque como una nación, significaría una población de 216.1 millones de habitantes, un Producto Bruto Interno (PBI) de US$1'164,000 millones, reservas internacionales netas de US$333,000 millones y un nivel de inversión extranjera directa de US$68,263 millones. Obviamente se trataría de una economía bastante grande. Sin embargo, es importante darle una visión individual e identificar los retos que significa esta Alianza para cada uno de los cuatro países, debido al tamaño y la realidad de estos.

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EXPECTATIVASDurante la Cumbre que se desarrolló en Paracas se vivió una gran expectativa en especial por la integración de mercados financieros de los cuatro países, pues ello significa una visión ambiciosa y su consolidación traería beneficios a todos sus agentes.

Alonso Segura, ministro de Economía y Finanzas, indicó a Perú21 que esto tendrá un impacto significativo para el país, debido a que el mercado de capitales peruano representa poco menos del 10% de la Alianza del Pacífico y que, si toda la plataforma se logra abrir, significaría que los inversores peruanos tendrán acceso a diez veces el 'pool' de emisores, lo cual mejora las condiciones. Además, esto atraería a las grandes empresas internacionales y se incrementarían las inversiones en su totalidad.

Otro efecto positivo que dejó la Cumbre es el desarrollo de las medianas, pequeñas y microempresas, pues se acordó impulsar la cooperación y el trabajo conjunto entre ellas mediante el encadenamiento productivo. Carlos González, gerente de Estudios Económicos de ADEX, señaló que los encadenamientos productivos son una muy buena iniciativa que permitirá que las empresas nacionales adquieran experiencia de las extranjeras y reafirmen su competitividad.

Recuerda que formar cadenas productivas con valor agregado es aún difícil y las posibilidades individuales de mejorar son pocas, pues, según las estadísticas, se estaría retrocediendo. El claro ejemplo es la manufactura, que tiene menos peso en el PBI cada año. Por ello, el encadenamiento ya se está dando; los sectores químico, farmacéutico, cosméticos y alimentos ya están buscando integración.

Un tercer punto a destacar es la integración comercial, pues, en comparación con los otros países, Perú tiene la balanza más pequeña de todos. Juan Manuel Ferrón, socio director de PwC Advisory de México, puntualizó que la débil balanza comercial de Perú y esta nueva situación se asemejan a cuando México decidió abrir su mercado a EE.UU. En esa experiencia recuerda que, durante tres años, la balanza comercial fue deficitaria, pero esta pérdida fue compensada con la llegada de inversiones. Sin embargo, a partir del cuarto año, la situación de la balanza comercial mejoró debido a que la inversión permitió desarrollar productos y servicios con alto nivel competitivo, y así empezaron a incrementarse las exportaciones y la balanza comercial.

En adelante, será importante evaluar los costos y beneficios de la integración y aprovecharlos al máximo.

SABÍA QUE

Por: Alberto mendietya (alberto.mendieta@peru21.com)