Más de 120 atletas LGBTQ competirán en los Juegos Olímpicos de Tokio

El medio ha contado, hasta ahora, 121 atletas LGBTQ que viajarán a Japón para participar de los Juegos Olímpicos, que comienzan el 23 de julio y culminan el 8 de agosto. En comparación a las ediciones anteriores, este año habrá mayor cantidad participación de miembros de esta comunidad, ya que en los Juegos de Río 2016 participaron 56 atletas LGBTQ y en los Juegos de Verano de 2012 estuvieron 23 atletas olímpicos de esta comunidad.

Una de las participantes más destacadas es Laurel Hubbard, quien será la primera atleta transgénero en competir en los Juegos Olímpicos modernos. Ella es levantadora de pesas de 43 años y competirá por Nueva Zelanda en la categoría femenina de más de 87 kg.

“Cada atleta que se siente orgulloso y es una inspiración para otros que aún no han salido del armario, o que no están seguros de poder ser ellos mismos y practicar el deporte que aman”, reflexionó Joanna Hoffman, directora de comunicaciones de Athlete Ally, un grupo de defensa sin fines de lucro con sede en Estados Unidos.

Poppy Starr Olsen representará a Australia en el debut del skate en los Juegos Olímpicos y aseguró que es más difícil para los atletas de élite y otros en puestos públicos salir del armario. “Tienes muchos ojos puestos en ti, es aterrador para mucha gente, pero si estás un poco bajo el foco de atención, tienes que hablar con mucha más gente y eso puede ser muy abrumador”, contó a TIME.

Hoffman resalta que el creciente número de atletas LGBTQ podría ayudar a generar un cambio significativo, al menos en el mundo del deporte. “Quizás lo más importante es que [los atletas LGBTQ] ayudan a alentar a los equipos y las ligas a institucionalizar la inclusión, para que los atletas sepan que están en un ambiente seguro y acogedor donde pueden salir y donde no se tolera la discriminación”, precisa.

Agrega que hay trabajo por hacer, incluidas cosas como dar a conocer que no se aceptan las “charlas de vestuario” dañinas. “Es fundamental que los equipos y las ligas adopten una política de tolerancia cero para el lenguaje anti-LGBTQ + e inculquen a los entrenadores y jugadores desde el principio que las palabras importan y que todos tenemos un papel que desempeñar para garantizar que el deporte sea realmente acogedor para todas”, considera.

La patinadora Starr Olsen espera que el número récord de atletas LGBTQ, que compiten en los Juegos de este año, pueda ayudar a actuar como modelos a seguir para las personas más jóvenes. “Solo puede inspirar a la próxima generación y mostrarles que nos sentimos muy cómodos en nuestros cuerpos”, expresa.