Han pasado dos semanas desde que empezara la Feria Internacional del Libro (FIL) de Lima, y ha sido un evento exitoso. Hablamos con la directora cultural de la FIL, Melissa Pérez García, sobre la recepción y los futuros eventos.
¿Cómo ha sido la acogida este año en la feria, en comparación con años pasados?
Hemos tenido una gran acogida de parte del público. Se incrementó la asistencia en un 20% en comparación con el año anterior, y eso que antes también había crecido, porque nos recuperamos de pandemia. La gente viene no solo por los libros, sino para vivir una experiencia FIL, con las actividades que realizamos: talleres y escritores.
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¿Ese 20% de incremento se debe, precisamente, a estas actividades?
Sí, cada vez ampliamos más nuestra propuesta cultural, siempre teniendo una fina relación con los libros. Somos conscientes de que hay nuevas formas de lectura; no solo pensamos en el lector tradicional, con su tomo de 600 páginas, sino también en novelas gráficas, en objetos e incluso en las narrativas de los videojuegos, que presentan una nueva propuesta de ficción, que promueven la creación de personajes y espacios.
"Hemos tenido una gran acogida del público. Se incrementó la asistencia (a la Feria Internacional del Libro) en un 20% en comparación con el año anterior”.
¿Cuál fue la actividad que más llamó la atención del público?
Posiblemente la presentación de la escritora Inma Rubiales, porque convocó a 700 personas a un auditorio creado para 500. Firmó libros, tantos que algunos no pudieron acceder al auditorio. También otra actividad que entusiasmó a la gente fue la presentación de Alfredo Bryce Echenique, quien, debido al éxito de la primera presentación, va a hacer una segunda firma de libros. En cuanto a las actividades musicales, fue muy popular el tributo a Chacalón, a cargo de Chacal y sus Estrellas, Los Doltons también. Estas actividades son para todas las edades.
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¿Qué otras actividades habrá estos días?
Vendrán nuestros invitados internacionales. Bueno, el ensayista político Andrés Oppenheimer estará presente el domingo 4 (hoy). También la escritora de novelas románticas Megan Maxwell, y la presentación del libro del centenario de la ‘U’.
La feria se ha extendido más allá de los libros. ¿Siempre se tuvo eso en mente?
Sí, no solo en la propuesta bibliodiversa (cómics, novelas), sino también productos asociados al libro, como, por ejemplo, los juegos de mesa. La mayoría tiene una historia, y la gente aprende a través de ella. Lo que queremos es acercar a las personas que no tenían buenas experiencias con los libros para que no les teman a los libros. También estamos pensando en generar la mayor posibilidad de inclusión, promoviendo funciones, por ejemplo, de inclusividad para niños con dificultades auditivas; o libros en lenguaje de braille, además de libros en lenguas originarias.
¿Qué actividades culturales se tendrán en mente a futuro?
Caro Díaz (masquebipolar) me recomendó que hagamos “la hora silenciosa”, “la hora calmada”, con las luces y volúmenes bajos, para ayudar a las personas neurodivergentes.
¿Qué opinas de la idea de trasladar clásicos de la literatura al formato de cómics? Perú21 tiene esta propuesta.
Mi yo de 12 años habría agradecido eso, porque las primeras experiencias que he tenido con las novelas clásicas no fueron buenas en el colegio. Nos presentaban un libro gordo en un lenguaje que uno no entendía, y me perdí bastantes experiencias bonitas. Esto es muy práctico para aquellos que quieren introducir sus hijos a la lectura. El cómic es ideal, ya que tiene arte y literatura.
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