PUBLICIDAD
El peligro de las ‘fake news’ para la industria farmacéutica
El trabajo profesional se deberá centrar en involucrar un diseño fino y una ejecución cuidadosa y flexible, interviniendo preventivamente en escenarios complejos como el de los medios de comunicación o el político.
Imagen
Fecha Actualización
Desde la invención de la primera vacuna por Edward Jenner, “el padre de la inmunología” que descubrió la fórmula contra la viruela en 1796 –la enfermedad que mataba a medio millón de personas al año–, las fake news siempre estuvieron presente y no tardaban en correr como reguero de pólvora para advertir, en tiempos aquellos, que las personas inoculadas mutarían a seres con hocico, cola, orejas caídas, etc. Hoy, a 225 años de la invención de Jenner, y en medio de una pandemia, los ataques contra las vacunas se mantienen incólumes y se formulan sin piedad o rigor alguno.
Todo indica que el ataque de las instituciones, movimientos antivacunas y sus corrientes ideológicas añadirán un nuevo ingrediente adicional a las fake news: Cuestionar el comportamiento de la industria farmacéutica durante la pandemia. “Ya sea en el Perú o en cualquier parte del mundo, una vez controlada la pandemia los reflectores apuntarán a temas tan sensibles como los precios a los cuales se vendieron las vacunas, las asignaciones por país, las relaciones entre los laboratorios y los Estados, y los procesos de compras públicas.” Señaló Manuel Ayllón, CEO de Orange 360, agencia especializada en comunicación integral.
Por eso, ante un próximo escenario de ataque, en el cual la reputación de los laboratorios será fuertemente atacada desde diversos frentes: medios de comunicación, políticos, asociaciones de consumidores y de pacientes, entre otros; las empresas de la industria deben empezar a trabajar, desde ya, administrando información y mensajes de manera abierta, transparente y efectiva.
“La comunicación en períodos de crisis va más allá de emitir comunicados institucionales o gremiales para responder ataques. El trabajo profesional implica un diseño fino y una ejecución cuidadosa y flexible, con mediciones en tiempo real sobre el impacto de lo planificado, interviniendo preventivamente en escenarios complejos como el de los medios de comunicación o el político”, agregó Ayllón.
Prepárense para lo que viene
Las fuentes de los ataques contra las vacunas se han institucionalizado peligrosamente, y sus ataques en plena crisis del COVID-19 tejen teorías tan descabelladas como la inexistencia del virus, la implantación de chips o la modificación genética, a partir de la vacunación. Por ejemplo, los grupos antivacunas como el National Vaccine Information Center y el Children’s Health Defense, fundado por Robert F. Kennedy Jr., están avivando todo tipo de temores en el mundo sobre lo que ellos consideran “posibles” muertes generadas por la vacunación, pese a que lo único científicamente comprobado hasta el día de hoy es que las vacunas evitan la muerte por complicaciones derivadas del COVID-19.
Los tentáculos de estas organizaciones llegan a muchos países, inclusive al nuestro, donde ya tenemos movimientos antivacunas de larga data y también a muchos influenciadores trabajando para estas organizaciones, que se encargan de atacar de manera permanente a las vacunas, como el caso de un conocido actor de TV y cine que culpa a la vacunación de causar autismo en uno de sus hijos.
“Hasta ahora es indudable que los ataques de los antivacunas en el Perú representan un porcentaje insignificante versus al tremendo impacto positivo en el ideario colectivo que produce salvar millones de vidas mediante la inmunización contra el COVID-19. Y es que jamás se han visto propaganda y prensa tan contundentemente a favor de las vacunas, y eso es muy positivo porque permite salvar vidas.” Agregó Ayllón
Sin embargo, el especialista sostiene que, en la industria de las comunicaciones, ya es vox pópuli que varios periodistas y portales de investigación que operan en el Perú están realizando minuciosas indagaciones para desarrollar investigaciones en contra de la industria farmacéutica, muy probablemente con ciertas dosis de desinformación producto de la complejidad del tema.
Los tiempos en los cuales los laboratorios enfrentaban solamente olas de fake news o escasos informes de investigación cambiarán muy pronto, y la industria debe estar preparada para superarlos.
VIDEO RECOMENDADO
PUBLICIDAD
ULTIMAS NOTICIAS
Imagen
Imagen
Imagen
PUBLICIDAD