¿Cuáles son las diferencias entre alcohol etílico y metílico?

Hasta hace pocos días, se registró que 29 personas habían muerto por tomar alcohol metílico mezclado en cañazo y aguardiente en el distrito de Comas. Este alcohol industrial fue mezclado en estas bebidas que causaron la intoxicación de estas personas, llevándolas a la muerte.

“El hospital comenzó a reportar casos a partir del 28 de agosto, pero ya, entre el 6 y 7 de setiembre, se fueron incrementado los casos, a la actualidad hemos reportado 42 casos, de los cuales 29 han fallecido”, expresó Óscar Herrera director del Hospital Sergio Bernales, en Collique.

“Esto nos está indicando que la letalidad por intoxicación por alcohol metílico es bastante alta”, agregó.

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Así pues, se iniciaron varias diligencias mediante la Dirección General de Salud Ambiental e Inocuidad Alimentaria (Digesa), para detectar y decomisar estas bebidas que se comercializan de forma irregular y son un riesgo para la salud pública.

Por ello, te explicamos cuál es la diferencia entre el alcohol etílico (etanol) y el metílico (metanol), y, más importante, cómo interactúan con el organismo luego de su ingesta.

Alcohol etílico

Este es un líquido incoloro y volátil que se presenta en bebidas tras un proceso de fermentación de azúcares con levadura, que posteriormente se destilan. Dependiendo de la marca y el tipo de bebida, este se combina con otras sustancias químicas.

Existe un proceso para obtener etanol libre de agua, o alcohol puro. Para ello, se aplica una mezcla con benceno y ciclohexano. Esta sustancia se emplea en bebidas alcohólicas comerciales, pero también para desinfectantes o perfumes.

El exceso de su consumo causa mareos, náuseas, vómitos, sed, deshidratación, dolores de cabeza y pérdida de la conciencia. Las molestias dejan algunos efectos secundarios que, dependiendo de la persona, desaparecen con el paso de las horas.

Alcohol metílico

Esta sustancia es conocida como alcohol de madera, una fórmula incolora, inflamable y tóxica que se emplea como anticongelante, disolvente y, en algunos casos, como combustible para algunos tipos de estufas portátiles.

Esta sustancia es utilizada en algunos tipos de motores, por lo cual se considera altamente tóxica y no apta para el consumom humano. Antes de que el metanol pueda ser asimilado y metabolizado por el cuerpo, se puede presentar síntomas similares a la embriaguez por etanol.

Sin embargo, si el organismo se intoxica con esta sustancia, puede ocasionar alteraciones de la conciencia extremas, incluso el coma, reducción de la presión arterial, taquicardias. En casos graves, convulsiones e insuficiencia respiratoria, que podrían terminar en la muerte.

El metanol, en nuestro organismo, termina convirtiéndose en ácido fórmico, que se acumula en nuestro cuerpo y termina siendo la razón por la cual resulta en intoxicación. Si bien ambos tienen consecuencias similares en el organismo al beberlos, las consecuencias a largo plazo son muy distintos, según explica el profesor del Departamento de Química Inorgánica y del Instituto de Ciencia de los Materiales de la Universitat de València, Fernando Sapiña.

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