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Redacción PERÚ21

redaccionp21@peru21.pe

Por: Fritz Dubois, La opinión del directorEl gobierno empieza a parecer un equipo de futbol que luego de un intenso primer tiempo está agotado y solo está esperando el pitazo del árbitro para ir al descanso.

Incluso, el agotamiento es tal que ya se están peleando de mala manera entre jugadores del mismo equipo, recriminándose públicamente por el resultado. Asumimos que en el entretiempo el entrenador Humala anunciará algunos cambios para salir en el segundo tiempo renovado y con un esquema de juego más ordenado.

En realidad, a todo gobierno le toma tiempo agarrar el ritmo para integrarse y jugar en equipo. En el actual caso tienen el problema adicional del cambio radical de estrategia que hicieron sobre la marcha en la segunda vuelta y que aún no han aceptado quienes estuvieron en la nómina inicial, pero luego fueron dejados de lado.

Asimismo, hay algunos que sí están en la cancha pero no parecen estar de acuerdo con la nueva táctica y están jugando de manera errática. Finalmente, al margen de que estén o no de acuerdo con la estrategia, hay también jugadores que no están a la altura de lo que se esperaba.

Por todo ello, parece inevitable que ocurra un sinceramiento en la relación con aquellos que no creen en la línea moderada. No creo que se trate de que salga la izquierda y entre la derecha, no hemos visto que se haya producido una vuelta en U ideológica en el mandatario. En todo caso, la ideología es secundaria. Hay tan pocos tecnócratas experimentados que luego de cualquier cambiolo, más probable es que sigan dependiendo de los mismos funcionarios.

Más bien lo que se requiere es encontrar ministros más eficientes, hay algunos: Mujer, Cultura, Energía, Justicia, que evidentemente están desubicados.Mientras que otros como Agricultura no parecen estar interesados en el cargo. Sin embargo, algunos de esos jugadores que están desentonando son claves para la estrategia de mantener el crecimiento para poder financiar un gasto social que sea mucho más ambicioso y amplio.

Para empezar la minería es vital para la inversión, pero el sector está dominado por una viceministra más interesada en la minería informal, de la cual nunca se ha desvinculado. Mientras que agricultura es fundamental para mejorar la productividad rural donde viven los más pobres entre los peruanos. Finalmente, con nuestro alarmante record de violencia doméstica y violaciones hay tanto por hacer. Pero la ministra de la Mujer solo está interesada en eventos mediáticos y en figurar.