El director del Museo Nacional de Sicán, Carlos Elera, señaló que la zona de mayor asentamiento de esta cultura, ubicada en el Bosque de Pómac, en Ferreñafe, , corre el riesgo de ser arrasada por un posible desborde del río La Leche –ante un eventual –, cuyo caudal bordea los diferentes centros arqueológicos ubicados en este lugar. Se había anunciado que hay un 70% de probabilidad de que en 2019 vuelva el síndrome climático.

Son cerca de 20 huacas y zonas monumentales que corren el riesgo de afectarse por las precipitaciones ocasionadas por este fenómeno natural.

Todavía hay tumbas que contienen fardos funerarios y máscaras que podrían ser destruidas si no hacemos trabajos de prevención. Si viene otro Niño, sería terrible. El núcleo de esta cultura está en peligro”, expresó Elera.

PROGRAMA

El funcionario indicó que tienen un programa a cinco años para tomar acciones y evitar que este fenómeno siga destruyendo necrópolis y templos. Se trata de obras de descolmatación, rescate arqueológico, defensas ribereñas y estudios sistemáticos de la zona.

“Tiene que haber un presupuesto, es la memoria de nosotros y no podemos dejar que se destruya”, comentó.

TENGA EN CUENTA

 El fenómeno de El Niño costero de 2017 ocasionó perjuicios en caminos y estropeó la arquitectura de huacas como Las Ventanas y La Merced, en Pómac.