[Opinión] Richard Arce: ¿Solo importa la elección en Lima?
[Opinión] Richard Arce: ¿Solo importa la elección en Lima?

Este domingo pasado fue interesante, ver la cobertura que tuvo el debate de los candidatos al Municipio de Lima Metropolitana; absolutamente todos los canales en señal abierta transmitieron este evento, por la relevancia e importancia que tiene, a una semana de las elecciones regionales y municipales.

Solo que se olvidaron, una vez más, de un detalle determinante, precisar que también son elecciones regionales. Eso significa que, en todo el Perú, en sus 24 regiones y la provincia constitucional del Callao, habrá una contienda electoral para elegir gobernadores regionales, que también es importante.

La llamada de atención es porque pudieron haber sido más democráticos, ya que el evento era organizado por el propio JNE, para tener la transmisión de los otros debates regionales para diversificar la audiencia. Soy consciente de que Lima tiene más de 13 millones de habitantes y representa la ciudad más grande del país, pero se requiere visibilizar a todo el país, ad portas de las elecciones.

Con objetividad, pudieron haber diversificado la transmisión de los debates con algunas de las regiones, para tener una alternativa con los electores, porque estos debates generan expectativa y permiten conocer a los candidatos y sus propuestas.

Esta decisión arbitraria muestra una innecesaria priorización del debate de Lima en desmedro de las provincias, a sabiendas de que la audiencia es a nivel nacional. Imaginen en un distrito de Apurímac o tal vez de Amazonas viendo los dimes y diretes de los candidatos por Lima; debe causar indiferencia, pero también desazón, porque se repite el centralismo hasta para temas electorales.

Tómenlo como una crítica constructiva. Estas pequeñas acciones ahondan esta especie de rechazo con todo lo que viene de Lima y entenderán que, sumado al discurso polarizante del gobierno, profundizamos esta absurda confrontación entre Lima y las provincias, y la sensación de exclusión que ya se viene capitalizando políticamente.