"Es por eso que hoy resulta vital unirnos a campañas como la que promueve, por ejemplo, el Banco de Alimentos del Perú, que ha comprado 150 mil kilos de papa a precio justo a agricultores ayacuchanos". (Foto: Difusión)
"Es por eso que hoy resulta vital unirnos a campañas como la que promueve, por ejemplo, el Banco de Alimentos del Perú, que ha comprado 150 mil kilos de papa a precio justo a agricultores ayacuchanos". (Foto: Difusión)

Gerente general de alimentos en PepsiCo

En el marco del quisiera reconocer a las agricultoras y los agricultores de nuestro país, quienes día a día trabajan para alimentar a miles de peruanos. Todo esto, incluso en la coyuntura de emergencia que enfrentamos debido a la inminente crisis alimentaria y a los efectos económicos y sociales derivados de la . Por eso, quiero empezar esta columna con un sincero: ¡GRACIAS!

Sin embargo, es importante reconocer que la realidad global y local nos exige trabajar en alianzas entre el sector privado, el gobierno y todos los actores interesados para, juntos, potenciar nuestras acciones y canalizar nuestro apoyo hacia los menos favorecidos. Según el IPE, localmente las familias más pobres registraron una inflación de 9,3% en abril debido a que destinan casi un tercio de su gasto al consumo de alimentos y bebidas.

Es por eso que hoy resulta vital unirnos a campañas como la que promueve, por ejemplo, el Banco de Alimentos del Perú, que ha comprado 150 mil kilos de papa a precio justo a agricultores ayacuchanos –región donde se concentra la mayor cantidad de pobreza en nuestro país– para entregarlas a comedores populares, albergues y ollas comunes, liderados por mujeres luchadoras que necesitan trabajar y reactivar sus economías a través de estas instituciones de ayuda social, con el fin de alimentar a 100 mil peruanos que viven en la pobreza. Nosotros nos hemos sumado a esa iniciativa, y también a la que encabeza la ONG CARE Perú, que busca empoderar a mujeres agricultoras en Lima, Ica y Piura y contribuir con su desarrollo, economía y combatir la desnutrición de más de 400 mil personas.

Es momento de actuar bajo un propósito compartido, uniendo esfuerzo para ayudar a aliviar el impacto de la crisis alimentaria. Apoyemos, desde distintos frentes, con nuevas tecnologías para sistemas de uso eficiente de agua, monitoreo del clima con estaciones meteorológicas, de plagas y enfermedades, mediante drones y softwares especializados. También promocionando el uso eficiente de fertilizantes y el análisis de suelos y comprobación de su dosis en el campo para superar las situaciones críticas que se presenten. Capacitemos y trabajemos mano a mano con los hombres y mujeres del campo, de tal modo que afiancemos, como ha sido en nuestro caso, una relación de ganar-ganar en todas nuestras interacciones.

Por eso, en esta fecha especial, volquemos nuestros esfuerzos para trabajar juntos y apoyar a los agricultores.