[Opinión] Juan Stoessel: “Tiempos recios”

Ha sido un inicio de año sumamente complicado, pero, en medio de la convulsión, vemos algunas señales positivas. Los gobiernos regionales, quienes más cerca están de las zonas de conflicto, empiezan a cobrar protagonismo. Liderados por el gobernador de Arequipa, Rohel Sánchez, un político con ideas claras que no cae en demagogia, se han sumado activamente como interlocutores entre sus comunidades, el gobierno central y el Legislativo. Tienen claro que hay legítimas demandas, pero tienen igual de claro que, mientras sigan los bloqueos, saqueos y demás actos de vandalismo, no podrán ejecutar ningún proyecto en beneficio de sus regiones. Esto crea un círculo vicioso: las protestas paralizan al sector público y privado, se produce más desempleo, desabastecimiento y degradación de los servicios básicos, lo que, a su vez, retroalimenta las protestas.

Existe una inmensa frustración entre los millones que creyeron en el cambio prometido por Pedro Castillo y terminaron engañados. Es imprescindible apurar la salida de esta crisis. El adelanto de elecciones no será una solución de fondo, pero sí ayudaría a calmar las aguas y sacarnos de este entrampamiento. Tras el revés en la última votación, esperemos que el Congreso llegue a un acuerdo y definan fecha.

Del lado del turismo, si bien el panorama continúa sombrío, el aeropuerto de Arequipa ha vuelto a operar. Una gran noticia, pues aquel y el de Cusco son claves para la recuperación del sector. También es muy positivo ver que el nuevo equipo del Mincetur no está de brazos cruzados como el anterior, sino que trabaja intensamente. La viceministra estuvo recientemente en Cusco y Promperú se prepara para promocionar agresivamente al Perú, apenas se den las condiciones para la reactivación.

Está en nuestras autoridades mostrar madurez, no caer en posiciones irreductibles y poner al país por delante.

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