[OPINIÓN] Fernando Cillóniz: “Hacia la reforma del monstruo de la justicia”
[OPINIÓN] Fernando Cillóniz: “Hacia la reforma del monstruo de la justicia”

Los audios de Los Cuellos Blancos del Puerto revelaron –a la bruta– el extremo al que pueden llegar ciertos jueces y fiscales corruptos. Es verdad, los “audios de la vergüenza” se dieron a conocer a mediados de 2018. Sin embargo, cabe preguntarnos: ¿habrá mejorado el Poder Judicial o seguirá tal cual?

Bueno pues, me temo que todo sigue igual. El “sistema de justicia” –léase, el Ministerio Público y el Poder Judicial, propiamente dicho– sigue infestado de corrupción. Por supuesto, soy el primero en reconocer que hay jueces y fiscales excepcionales –incorruptibles, inteligentes, incuestionables– que merecen nuestro mayor aprecio y gratitud. Pero –lamentablemente– hay también de los otros.

Los convenios de cooperación interinstitucional entre el Poder Judicial y varias universidades privadas no conducen a nada bueno. Sobre todo, cuando se trata de aquellas universidades de propiedad de políticos en funciones, como César Acuña, José Luis Elías, José Luna, etc.

¿Qué justicia se podría esperar de jueces y fiscales, cuyos hijos –u otros familiares– estén estudiando en dichas universidades, ante casos delictivos perpetrados por los propietarios de las mencionadas universidades? Claramente… ninguna.

Aparte de conflictos de intereses, existe también el problema de la precariedad –en todo sentido– del Poder Judicial. ¡Qué fácil debe resultarle a un criminal amenazar –o sobornar– a un juez o fiscal para torcer un fallo judicial a su favor! ¿No será por eso que tantos criminales andan libres y/o son declarados inocentes?

He ahí otro inmenso desafío nacional, del cual se habla poco, muy poco… la reforma del “sistema de justicia”. Reforma que, dicho sea de paso, no podría gestarse dentro del propio Poder Judicial –por más autónomo que sea– porque no se puede esperar nada del gato despensero.

La reforma del “sistema de justicia” debería gestarse desde la ciudadanía, y en alianza con la prensa. Una prensa y una ciudadanía que funjan de controladores y evaluadores del monstruo de la “justicia” en nuestro país. ¿Juez coimero? ¡A la cárcel! ¿Juez miedoso? ¡A su casa! Todo público. Todo transparente. ¡No queda otra!

Como en el caso de Los Cuellos Blancos del Puerto, hagamos que las paredes hablen. Grabemos subrepticiamente a los jueces y fiscales corruptos y que todo el mundo se entere de la porquería que son. Saquemos a la palestra a los ‘César Hinostroza’, ‘Guido Aguila’, ‘Iván Noguera’ y demás. Todavía quedan muchos de esos en el Poder Judicial.