"Como sugirió Arévalo, si el MEF sigue en ese plan, concediéndole solo “migajas” al Poder Judicial en momentos en que el país necesita un sistema de justicia eficiente, sólido y con recursos, pues mal no estaría que se interpele y censure a Contreras".
"Como sugirió Arévalo, si el MEF sigue en ese plan, concediéndole solo “migajas” al Poder Judicial en momentos en que el país necesita un sistema de justicia eficiente, sólido y con recursos, pues mal no estaría que se interpele y censure a Contreras".

Es habitual que cada vez que llega el mes en que deben elaborarse los presupuestos de los sectores públicos para el siguiente año, los reclamos se sucedan, pues lo que proyectan tanto como inversión como para gasto corriente suele ser recortado, a veces drásticamente, por el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).

El problema es que el MEF, cuando se encuentra en manos de malos profesionales, no necesariamente reparte y ajusta bien el dinero del Estado, que es de todos los peruanos, en función de las prioridades del país.

Y entonces se generan fricciones y cuando la incompetencia de uno de los lados es manifiesta, estas fricciones administrativas devienen en enfrentamientos públicos, como el que ha estallado desde hace unos días entre el presidente del Poder Judicial, Javier Arévalo, y el titular del MEF, Alex Contreras.

Sabemos que el principal problema para el Perú de hoy es la delincuencia. Y uno de los frentes para luchar contra esta lacra es el sistema judicial. El otro es la Policía. En ese sentido, el reclamo de la judicatura de tener un mejor presupuesto es justo. No implica que necesariamente se le dé todo lo que piden, pues tiene que haber correlación con los ingresos del fisco, pero al menos los funcionarios del jirón Junín no deberían cerrar las puertas de mala gana y, más bien, escuchar con atención los argumentos de la contraparte.

Por desgracia, eso no ha sucedido. Así, a un pedido razonable se le contestó con un comunicado oficioso y oficial en el que se indica que lo solicitado es “inviable” y quebraría las reglas fiscales, a lo que le siguió, a su vez, las fuertes contrarréplicas que ayer se hicieron públicas.

Como sugirió Arévalo, si el MEF sigue en ese plan, concediéndole solo “migajas” al Poder Judicial en momentos en que el país necesita un sistema de justicia eficiente, sólido y con recursos, pues mal no estaría que se interpele y censure a Contreras.

Un ministro que, dicho sea de paso, tampoco ha demostrado tener demasiadas luces, a juzgar por la paupérrima situación económica –sin un plan coherente para hacer frente a la recesión, por ejemplo– en que se encuentra empantanado el país.