[Opinión] Juan Stoessel: A Cusco por la puerta falsa

Cusco es el destino turístico más importante de Sudamérica, sede de una de las siete maravillas del mundo moderno. Un auténtico imán de turistas, que llegan atraídos por su magia, pero, en lugar de ingresar por la puerta grande, lo hacen por la puerta falsa. No es exageración. El Velasco Astete debe ser el peor aeropuerto del país. Nada funciona. Los arcos de seguridad están fuera de servicio. No hay cafetería ni restaurante abierto. Ni siquiera se puede tomar agua porque la máquina dispensadora está malograda. Las instalaciones, despintadas y descuidadas.

Y la cereza del pastel; para salir, los turistas deben arrastrar sus maletas hasta la calle, porque los taxis no pueden ingresar a la playa de estacionamiento para recogerlos ni dejarlos. Parece broma, pero el 2do. aeropuerto más importante del Perú, en el destino top del continente, no ofrece ni seguridad ni servicio ni la mínima comodidad. CORPAC, entidad que maneja (o mejor dicho, desmaneja) el Velasco Astete, recibe cientos de millones de parte de los concesionarios de los demás aeropuertos.

¿En qué se invierte ese dinero? Ojo, además de la pésima imagen que damos como país, son miles de personas, nacionales y extranjeros, maltratadas diariamente. ¿Quién los defiende: Indecopi, Indeci? Al parecer nadie, porque esto sucede a vista y paciencia de las autoridades, que brillan por su ausencia. Estamos ante el ejemplo más flagrante de una empresa del Estado fallida. Si CORPAC operase un aeropuerto recóndito, que casi no tiene tráfico, igual estaría mal pero en fin. Sin embargo, ¡hablamos de la puerta de entrada a nuestro atractivo estrella! Y no solo es tema de infraestructura, hace unos días hubo huelga de controladores aéreos. El Velasco Astete es un barco a la deriva, sin capitán ni marineros. Solo queda decir: ¿hasta cuándo?

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