Fue al médico por una infección urinaria, pero le retiraron un vaso de vidrio de la vejiga

¡Insólito! Una mujer vivió por cuatro años con un vaso de vidrio incrustado en su vejiga. La paciente presentaba diversas molestias en su cuerpo y, según intentó reconocer los síntomas, estaba segura que sufría de una infección urinaria; sin embargo, tras realizarle exámenes, los médicos quedaron sorprendidos con los resultados.

Cuando la paciente llegó al centro médico dijo que sentía como una cistitis, inflamación de la vejiga desde hace algún tiempo, pero que no había seguido un tratamiento. Tras los primeros análisis, los médicos vieron que no tendría algún síntoma relacionado.

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No tenía hematuria, rastros de sangre en la orina, tampoco padecía de incontinencia urinaria, pero presentaba un índice de glóbulos rojos más alto de lo normal, que fue señal para creer que su cuerpo estaba luchando contra una infección. Cuando los médicos revisaron los escáneres de la radiografía encontraron un vaso estaba dentro de un cálculo vesical de ocho centímetros de ancho, que suelen ser difíciles de ubicar a simple vista.

Los médicos, Ahmed Chaabouni, Ahmed Samet, Mohamed Fourati, Houcem Harbi, Mohamed Amine Mseddi y Mourad Hadjslimene, del departamento de Urología del Hospital Académico Habib Bourguiba, en Sfax de Túnez, indicaron que el objeto pudo llegar donde estaba debido a una práctica sexual y que no suelen ser retirados porque los pacientes siente mucha vegüenza hablar de este tipo de situaciones.

Según los especialistas, en este caso específico, los cálculos se originan por masas duras de minerales que aparecen por una mala eliminación de orina. También indicaron que pueden crecer objetos extraños alojados en el interior, por ejemplo, en este caso, el vaso de vidrio.

La paciente fue sometida a una cirugía donde lograron extraer el cálculo de su vejiga, el cual fue abierto para apreciar el vaso que contenía.

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