Rosa Mavila dejó entrever más renuncias en Gana Perú

Aunque en Gana Perú descartaron anoche nuevas renuncias en la bancada de gobierno, la legisladora Rosa Mavila, que ayer finalmente oficializó su dimisión a la alianza de gobierno en el Legislativa junto a Javier Diez Canseco, dejó entrever más bajas en el grupo parlamentario humalista.

"Sé que hay malestar, sé que los congresistas de provincias no se sienten tan representados", dijo en Canal N, tras señalar que la intención es formar una nueva bancada con Diez Canseco, Verónika Mendoza y Jorge Rimarachín, pero necesitan dos parlamentarios más para ser reconocidos como tal, según al reglamento del Congreso. "Algunos callan porque prefieren llevar obras a su tierra y otros porque creen en criterios de lealtad sin crítica", añadió.

Sobre su renuncia a Gana Perú, minimizada por el oficialismo, Mavila dijo que "la gota" que rebalsó el vaso fue el manejo del Gobierno del conflicto en Espinar y calificó la detención del alcalde de esta provincia cusqueña, Óscar Mollohuanca, de "excesiva, inoportuna y polarizadora", pese a que el burgomaestre azuzó las protestas que cobraron dos vidas y un centenar de heridos.

La parlamentaria sostuvo que los tres exmiembros de Gana Perú defendieron la idea de buscar vías de diálogo alternativas sin llegar al estado de emergencia, recomendaciones que fueron ignoradas. "Dentro hay una lógica de no aceptar la disidencia, que toda disidencia es una deslealtad", comentó.

La legisladora reiteró que el primer ministro, Óscar Valdés, "es uno de los problemas" que motivaron su salida del oficialismo. Alegó que el jefe del gabinete representa una opción "prodictatorial", es "admirador de dictaduras" y "denuesta los derechos humanos".