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Redacción PERÚ21

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Iris Mariscal Herreraimariscal@peru21.com

"Me gustaría que Ariel vuelva a vivir conmigo y con mi papá. Debería acercarse a nosotros, que somos su familia. Si no supe valorarlo antes es porque me pasó algo muy fuerte. Tenía 18 años y no supe manejarlo. No puedo decir que no me afecta lo que dice de mí, pero siempre voy a estar para él, después de todo es mi hermano".

Así se refirió respecto de su hermano. Ella asegura que no siente pena ni odio por Ariel, solo compasión. "También he cometido errores, pero la cárcel me ha servido para aprender y madurar", manifestó en exclusiva para este diario.

Además, comentó que el día en el que él se acerque a ella para retomar la relación fraternal, lo perdonará. "Es mi hermano nunca podré pensar en hacerle algo malo. Me ha costado llegar a este nivel pero el tiempo pasó", indicó.

Respecto a su padre, Marco Bracamonte, aseguró que han comenzado una nueva relación. "Es como tener un papá nuevo. Nunca antes lo había tenido", refirió.

ARRESTO DOMICILIARIODe otro lado, Bracamonte cuenta que hasta que acabe el juicio se dedicará exclusivamente a su defensa. "No estamos cantando victoria. Pienso que esto aún no termina. Sí, estoy tranquila por salir de la cárcel y estar en otro lado, pero no estoy relajada. Falta la sentencia", detalló tras señalar que no volverá a su casa de San Isidro, tampoco la venderá ni la alquilará. "Voy a vivir sola pero me visitará mi padre, mi tía y la gente que estuvo durante este tiempo conmigo, así que siempre tendré compañía", contó.

SICARIO DEBE PAGAR tiene que pagar definitivamente porque él fue el asesino de mi madre, así le den 30 o 35 años, ella ya no va a vivir. Esta pérdida nunca se superará".

"No me interesa que todo el Perú me vea llorar por mi mamá. Es como prostituir lo que siento. Es algo muy mío. La gente que me conoce sabe todo lo que yo sufro. Los tres primeros años yo estaba muerta por dentro. Luego, la situación me obligó a despertar", manifestó.

Sobre el tiempo en la prisión indicó que en Santa Mónica encontró un hogar y una familia, algo que afuera no tenía y que eso la ayudó a sobrellevar el dolor.

"El primer año en la cárcel sirvió para hacerme despertar de la depresión, tenía que defenderme. En el segundo me di cuenta de que sí podía luchar contra esto y el tercero fue espiritual. Me ayudó a crecer, a madurar, a darle forma a las cosas y a mejorar la relación con mi padre", sostuvo.

PLANEAN EL FUTUROCuando el proceso judicial acabe, tanto Liliana Castro como Eva piensan demandar a quienes "ensuciaron" su honor, entre medios de comunicación e incluso a una empresa de telefonía.

Por otro lado, Eva piensa retomar el control de Sideral y poner en orden todo. "El desbalance que hallaron los peritos tiene que ver con temas de Sunat", afirmó. Además, planea viajar unos días a una playa del norte con su padre y estudiar diseño de modas. También dijo que quiere hacer trabajo social con los hijos de las presas del penal.

Mientras tanto, Liliana dijo que piensa terminar de estudiar ciencias de la comunicación y trabajar.

Sin embargo, si la sala falla en su contra, ambas señalan que seguirán luchando hasta demostrar su inocencia.

Respecto a Ariel, Castro Manarelli afirmó que no le guarda rencor y que lo mejor de toda esta experiencia es sentir el apoyo de su familia y poder acercarse a su padre.

por exceso de carcelería y esta entrevista se realizó aún en el penal. Perú21 se mezcló entre la gran cantidad de personas que fueron a visitarlas ayer y, así, logró conversar unos minutos con ellas.

TENGA EN CUENTA

- Dentro de dos semanas se dictaría la sentencia contra Eva Bracamonte, Liliana Castro y Alejandro Trujillo.

- El Ministerio Público concluyó el último viernes que Eva y Liliana se coludieron para mandar a asesinar a la empresaria judía Myriam Fefer.

- Entre mañana y el martes ambas abandonarían la prisión, tras los respectivos trámites.

- Eva Bracamonte se quedará en un departamento de Barranco y Liliana se mudará a la casa de un familiar en la urbanización San Antonio, en Miraflores.