Ni snacks, ni chocolates, ni gaseosas. La categoría más afectada por los octógonos nutricionales sería la de productos naturales y light que lleven estos sellos, pues al ser observados en los empaques deteriorarían la confianza que estos productos habían ganado de los consumidores.

Este escenario sería posible en el mediano plazo, explica a Perú21 el gerente de Expert Solutions de la, Ricardo Oie: “Por la experiencia en Chile y Ecuador, muchos productos que se ofrecían como una solución más natural versus otros con mucho azúcar o grasas, al aparecer los octógonos, fueron los más afectados y les fue más difícil recuperarse (…). Es por una pérdida de confianza”.

Por el contrario, productos como los snacks, que por el momento podrían ver reducido su consumo, no resultarían tan afectados en el largo plazo porque quienes los compran ya son conscientes de, por ejemplo, los niveles de grasa.

En el caso de las , su demanda continuaría un rumbo decreciente, de acuerdo con lo observado en los últimos años.

“Ya el consumidor lo ha ido interiorizando, no es que el impacto se vaya a dar desde ahora”, agregó.

Según Oie, el plazo ideal para evaluar el impacto de los octógonos en los consumidores debería ser luego de un año, pues los efectos variarán con el tiempo.

“En el primer trimestre (de vigencia de los octógonos) se ve una afectación en un buen número de categorías, pero después en muchas se comenzará a recuperar el consumo”, comenta Oie.