Alianza Lima aún disputa el título del 2023, pero ya está planificando el plantel para el próximo año, donde no seguirían hasta 10 futbolistas -principalmente- por bajos rendimientos, lesiones o indisciplinas.
Línea por línea, los aliancistas irán desprendiéndose de algunas figuras de mucho renombre, pero poco aporte, medido en comportamiento, tapadas, asistencias o goles. En el arco, el primer sacrificado sería Ítalo Espinoza.
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En la defensa, Edinson Chávez y Santiago García correrían la misma suerte y tendrían que buscar otra club para la temporada 2024. El primero por no hacerse titular y el segundo por su irregularidad y fragilidad.
En la volante, Oswaldo Valenzuela, quien nunca explotó; Andrés Andrade, quien sufrió una lesión en la rodilla que le impidió jugar media temporada; y Christian Cueva, quien nunca rindió a las expectativas, se irían.
En la última línea, Gabriel Costa, por bajo rendimiento, y Pablo Sabbag, por la fragilidad de su estado físico, correrían la misma suerte que el resto de mencionados y -sorprendentemente- junto a Bryan Reyna.
Sí. El extremo izquierdo de la Selección Peruana no sería renovado en Alianza por las constantes indisciplinas y -sobre todo- declaraciones del propio delantero de querer dejar el club por emigrar al extranjero.