vivió la participación de Perú en el en familia. Su casa fue una fiesta, donde grandes y chicos llevaban la camiseta, la bandera y el grito de gol contenido. Como en tantas casas del país, cada jornada fue de unión, de fervor. Lo que pasó lo sabemos, y Gisela, hincha fiel, como se describe, ve con esperanza el futuro de la selección. Con Gareca o sin el maestro, la conductora de televisión cree en el equipo, en esos chicos que nos devolvieron la razón de creer, que nos transformaron el espíritu frente al fútbol, que de pronto pusieron de moda la bicolor. Para Gisela no hay medias tintas, no hay entusiasmo controlado, no le pidan prudencia. Con la emoción y el respeto intactos, sostiene que los chicos pusieron todo en la cancha. Y ahora van por más. Ella los quiere aplaudir en Qatar 2022, los quiere ver, desea celebrar una victoria y que los gritos por cada gol marquen la historia. Ahora sí se puede.

Todo lo vivido fue absolutamente emocionante. Ha sido increíble que hinchas y no tan hinchas hayamos podido vivir esta experiencia de Perú en un mundial. Al fin, lo conseguimos. El fútbol nos unió como no había pasado quizás nunca y eso lo tenemos que destacar, resaltar. La espera impulsó esta reacción masiva de peruanidad, tan buena, tan hermosa y edificante.

Como todos los peruanos, o casi todos los peruanos, sufrí mucho durante las Eliminatorias. Sin embargo, yo soy de las que nunca se desaniman, siempre creo, y no dejo de alentar, así que seguí el proceso con expectativa.

La selección hizo un extraordinario papel y no hay nada que discutir al respecto. No creo que haya sido un papel regular, fue buenísimo. Confío mucho en lo que vendrá, el futuro se presenta inmejorable y muchas voces lo reconocen.

Nuestra participación no ha terminado, simplemente empezó un camino poco antes de llegar a Rusia. Ya iremos viendo cómo nos va. El hincha peruano, además, ha sido elogiado en el mundo y ha asombrado.

En estos tiempos en los que Perú no estaba en torneos sí, dejé de ver fútbol. Los mundiales no eran igual. Tenía el ánimo bajo.

Cuando Perú jugaba en algún evento, lo veía, claro, pero no había un entusiasmo como el de estos días. Yo nunca había tenido una experiencia así, con mi familia, con la camiseta, con esperanza.

Cada partido lo hemos celebrado con parrillada, comida peruana… Abrazos, palabras de aliento, lágrimas. Estaban mis nietas. Ha sido lindo. La familia de pie por estos muchachos.

En ningún momento me decepcioné. En ningún momento me quedé con el corazón partido.

Yo lo he vivido desde la parte del hincha que esperó tanto tiempo y que se dio cuenta de que el equipo estaba haciendo un gran esfuerzo. Es un equipo que ha demostrado disciplina, que siguió a un director técnico de talla y que tuvo un buen trato y una buena comunicación con la prensa.

Hemos visto el dolor, la lucha y el sacrificio de los chicos. ¡Cómo no identificarse con una selección así! El Perú se unió en una sola voz por la selección.

Gritar los goles contra Australia nos dejó sin voz. Fue maravilloso. Mi mamá, mis nietos, los cuñados, amigos… Creo que describirlo no permite reflejar de manera real lo que pasamos. Todo fue intenso y bonito. Más peruanos que nunca, el himno… Demasiadas emociones juntas.

Me encantaría estar en Qatar. No pude ir a Rusia por trabajo. Pero si tengo vida, lo más probable es que me vaya a Qatar a alentar a la selección. Sé que nos irá bien.

Creo en Gareca, ojalá que no se vaya, ojalá siga con nosotros. Y si toma la decisión que no queremos, adelante y gracias. Yo creo mucho más en la fuerza de un equipo. Esa fuerza ha dado estos resultados.

Soy de esas hinchas que se emocionan, y que no se rinden, que no se desaniman. Pongo mis esperanzas en el equipo, y no soy de las que dice ‘no sirven’ porque no concretan. Soy consecuente, fiel. Con goles o sin goles, estoy con mi selección.

Me encanta Cueva, pero Paolo Guerrero, por su historia personal, me impresiona mucho. También me encantan Jefferson Farfán y su madre. Las madres (de los jugadores de la selección) son espectaculares. Me encantó lo que hizo la mamá de Paolo, y ver a Paolo, indesmayable, ir detrás de sus sueños. El equipo que tenemos es hermoso. Y solo tengo una palabra: gracias.

SABÍA QUE

- ¿Le pedirías a Ricardo Gareca que se quede?

No, se vaya o se quede siempre será para bien. Lo que ha hecho lo reconocemos todos. Creo en Gareca y su trabajo con los chicos ha sido extraordinario. Sin embargo, debemos mirar al equipo, valorar la fuerza que tienen y las ganas de no parar. Si Gareca tiene una oferta mejor, sin duda, debe tomarla. El Perú estará agradecido y no lo va a olvidar.