,  desde niño, en provincia, seguía el campeonato nacional de fútbol. Lo hacía por la radio. Tenía 10 años. Seguía al Aurich, se pegaba a la radio. Jugaba fútbol como delantero o centro derecho, pero no fue tan bueno. Así lo reconoce. Quizás por eso, remarca, terminó como dirigente de fútbol. Se define como un jugador frustrado. El presidente del Sporting Cristal es un hincha total, y ha vivido este mundial con alma y corazón, con la camiseta bien puesta, y la capacidad de analizar intacta. “Los cerca de 40 jugadores que pasaron por la selección tienen mi reconocimiento por todo su trabajo, muchas veces sacrificado”, menciona. Y con orgullo, esperanza y confianza, espera un mejor futuro para el fútbol peruano. Ya toca seguir para adelante y no parar. Gareca, el gran artífice de este
cambio, le inspira respeto y admiración. Nuestra selección es otra hoy. Y él, que ve el crecimiento de muchos jugadores, lo sabe más que nadie.

He visto tres mundiales por televisión: México, Argentina y España. Durante estos 36 años, he vivido la pasión del fútbol a través de Sporting Cristal, y con los torneos internacionales, casi todos los años. Extrañaba y siempre esperaba que Perú vuelva a un mundial, pero no es que yo estuve desconectado de esas emociones.

Pero es diferente el campeonato nacional que el Mundial, donde hoy toda la gente ha compartido esta felicidad. Los que no son hinchas no lo pueden entender, pero nosotros que estamos muy metidos en el fútbol disfrutamos cada partido como si fuera un campeonato mundial y más aún cuando jugamos la Copa Libertadores o algún torneo internacional, donde sentimos que representamos al Perú, y Cristal es una muestra. Nosotros lo primero que llevamos es el escudo y la bandera peruana. Siempre que jugamos un campeonato internacional, sentimos que representamos al Perú.

¿Por qué demoramos tanto en llegar a un mundial?

Porque tenemos un medio local, un gremio local y un campeonato local que es un agujero negro que la mayoría de lo bueno lo absorbe y no lo deja prosperar por falta de infraestructura, de planificación y de ver al fútbol como un negocio del espectáculo.

Esta clasificación la viví con mucho interés y satisfacción. Luego de un mal comienzo, vimos cómo el equipo se transformó. Yo creo que Gareca fue el gran artífice de esta transformación, tuve la oportunidad de conversar con él, y siempre confió mucho en los jugadores peruanos. Hizo los cambios que tenía que haber hecho y logró aprovechar las situaciones beneficiosas que pasaron al final del campeonato, como el reclamo de Chile y la mano de Ospina. No por eso desmerezco su buen trabajo.

Los cerca de 40 jugadores que pasaron por la selección tienen mi reconocimiento por todo su trabajo, muchas veces sacrificado. A los únicos que no se ha mencionado y ni siquiera la Federación lo ha hecho son los clubes locales que forjamos a esos jugadores que hoy día, en su gran mayoría, han sido exportados y juegan en otras ligas, porque 21 de los 23 jugadores de la selección están afuera. Ellos están jugando en campeonatos más competitivos, con mejor infraestructura y con clubes más armados (la mayoría). Esa migración se da porque hay muy poca inversión en el fútbol local, los sueldos que se pagan no son competitivos con los equipos internacionales.

Los jugadores en el Mundial tuvieron un buen desempeño. Yo viajo mucho, conozco a mucha gente de diferentes partes del mundo y siempre el comentario es ‘qué bien juega Perú’. Por fin se pudo decir ‘qué bien juega Perú’. Pero nos faltó peso ofensivo.

Tenemos que vencer esto. No es un problema solo de la selección, nos ha pasado a nivel de clubes también; pasa que uno juega muy bien y no concreta. La definición es algo fundamental.

Tengo gran optimismo con los jugadores jóvenes que vienen. Hay muchos jugadores que han ido a Rusia con la selección. Nosotros tenemos seis allí que tienen mucho futuro, pero no solo son ellos, es la calidad del campeonato, el entrenador que escojamos, que se planifique y que no se cruce con el fútbol profesional nacional y que la gente siga apoyando. La gente es más hincha del Barcelona o del Real Madrid y cada cuatro años se acuerda de la selección y los que estamos metidos en el fútbol sabemos que el asunto no pasa por acordarnos de fútbol peruano cada cuatro años.

SABÍA QUE

- ¿Quiere que se quede Gareca como DT de la selección? Me encantaría que se quede, pero debemos considerar su plan de desarrollo económico y profesional, y evidentemente debe tener otras alternativas.

- ¿Cuál es el jugador peruano que más destacó en este mundial? Para mí, fueron Luis Advíncula, André Carrillo y Yoshimar Yotún, pero uno es sesgado porque conozco a los que fueron de Cristal.