BRUSELAS/MADRID/BUENOS AIRES (Agencias).– El comisario europeo de Comercio, Karel De Gucht, le ha advertido a Argentina que sufrirá durante "mucho tiempo" las consecuencias de la expropiación del 51% de YPF, y aseguró que la Unión Europea (UE) "hará todo lo que está en su poder" para ayudar a España a que Repsol reciba una "compensación plena".
En opinión de De Gucht, con la decisión de tomar el control de YPF, "Argentina ha creado un terremoto en la comunidad empresarial internacional. Las consecuencias para su propio desarrollo económico se sentirán durante mucho tiempo".
El comisario volvió a recalcar que "Europa también se la juega en este asunto, ya que es una de nuestras compañías la que ha sido atacada".
Como resultado, señaló que ya le ha "dejado muy claro" a su homólogo argentino "cuán seriamente nos estamos tomando este asunto en la Unión Europea".
Por su parte, el Gobierno español bajó el tono para tratar de salvar las buenas relaciones con Argentina, pero insistirá en obtener una compensación económica para Repsol.
"No se discute el derecho de Argentina a apostar por la soberanía energética. Lo que se discute es que pueda expropiar sin pagar", agregó el ministro de Industria español, José Manuel Soria, amenazando con dejar a Buenos Aires fuera de la negociación comercial entre la Unión Europea y el Mercosur si no entra en razón.
Hoy, el Senado argentino debatirá la expropiación del 51% de las acciones de la petrolera YPF a la española Repsol. El oficialismo, mayoritario en ambas cámaras del Congreso, aseguró que cuenta con los votos necesarios para darle el visto bueno a la iniciativa en el Senado: unos 60 sobre un total de 72 escaños.
SABÍA QUE
- Repsol reclama a Argentina 10,500 millones de dólares por la empresa expropiada y recurrirá a la mediación del Banco Mundial.
- Esta estimación fue rechazada de plano por el gobierno de Cristina Fernández, y Madrid teme que no pague ni un dólar.
- Repsol afirmó que invirtió más de 20,000 millones de dólares entre 1999 y 2011 en YPF. Buenos Aires la acusa de no haber invertido lo suficiente.