Foto: Rochi León
Foto: Rochi León

Redacción PERÚ21

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Giovanna Valcárcel, ActrizGonzalo Pajaresgpajares@peru21.com

A los 14 años se mudó a San Miguel, por la sabrosa Av. La Paz. Giovanna Valcárcel, nueva figura de ATV (acaba de firmar por El estelar del humor), activa su memoria y nos dice: "Cuando me iba al colegio, veía a Mario Broncano entrar a la quinta. Al costado, en El Castillo, vendían droga. Allí me enteré cómo olían la pasta básica, la marihuana. Yo era la gringuita del barrio".

¿Te sentías una extraña?Me ubiqué al toque, aunque, la verdad, no tuve amigos por allí. Puedo ser loquita y juguetona, pero sé medirme, tengo mis límites.

Imagino que en el colegio eras ya inquieta…Uf, me botaron como de cinco. No era bruta, pero me escapaba de clases. Empecé en el Peruano Británico y pasé por el Elvira García. Allí, una chiquilla me propuso que fuese su novia. Fue entonces que empecé a ser bilingüe (risas). Le dije que no. Siempre me ha gustado lo diferente, pero en esa época no era tan radical. Ahora sí (risas).

¿Ya has ordenado tu vida?¿Para qué? (risas). Siempre quise ser actriz, pero no tenía plata. Felizmente, una amiga me pagó el taller de actuación de Roberto Ángeles. He trabajado con Aldo Miyashiro, con Efraín Aguilar, con Lucho Llosa, en las telenovelas que Iguana hacía para afuera.

Muchas de ellas eróticas…Pero en esas no trabajé: no había cuerpo, pues. Conmigo que solo hagan close-up (risas). Soy más floja para hacer ejercicios. Panamericana me regaló una 'lipo' (ríe) y la grasa me la pusieron atrás porque tenía solo un traserito. También me he operado la nariz. Me gustaría bajarme algo de los brazazos que tengo, pero me sirven para defender a mi mamá (ríe).

Eres fuertecita…Inspiro respeto (ríe). La verdad, respeto no inspiro, la gente piensa que estoy loquita y se ríe de mí. ¡No me respeta nadie! Más allá de bromas, soy una persona especial que hace lo que le da la gana y, por eso, la gente cree que puede hacer lo que le viene en gana conmigo. Está totalmente equivocada.

Juegas con la ambigüedad, si eres lesbiana, bisexual…Me gusta que la gente alucine conmigo. Muchas señoras dicen: "Tan linda Giovannita, cómo juega a que le gustan las chicas". Me ha pasado que, en la calle, en lugares públicos, un tanto en broma, algunas señoras me piden, riéndose, jugando, que las bese. Me parece chévere que la gente lo tome a broma.

¿Te gustan chicos y chicas?Me gusta la vida. Yo la paso bien, no molesto a nadie. Los hombres me parecen preciosos; las mujeres, hermosas, y mis ojos están para ver. Y, la verdad, no me he cruzado con muchos chicos guapos (risas). Hace dos años y medio no tengo pareja: a mí no me escogen, yo escojo. Ahora, que no tenga pareja no significa que no la haya pasado bien, que no haya hecho mis cositas.

Quieres hacer un programa con Karen Dejo, quien es muy sexual…Sí, es supersexual. A mí me dan ganas de abrazarla (ríe). Trabajó en Legendaris conmigo (una discoteca gay) y la gente nos pedía 'pico' como loca. A ella se le ha molestado mucho con su sexualidad, y si hemos decidido trabajar juntas es porque las dos sabemos lo que somos y lo que vendemos.

¿Qué vende ella?Sensualidad, sexualidad.

¿Tú?Picardía, doble sentido: soy doble en todo, pues (ríe).

¿A quién quieres besar?Ya besé a la más pedida: a Tilsa Lozano. De los hombres me gustaría besar a Christian Meier. Y si la boca le huele a cebolla, normal, me como una antes y lo beso. Tengo una fijación con la boca. Ay, si supieras lo que me decía mi novio: "Por esa boca entra todo" (risas). Y de las chicas me gustaría besar a Vanessa Terkes. Acúsenme de todo, pero no de tener malos gustos (ríe). Aunque no me gusta, a Roberto Martínez le daría un beso para saber qué se siente besar a Gisela Valcárcel, a Melissa Loza, a Vanessa Terkes y a Viviana Rivasplata (risas).

¿Cuál es la parte del cuerpo de un hombre que más te gusta?Los brazos.

¿De una mujer?La cara, los ojos. La verdad es que no me fijo en el cuerpo (y, al decirnos esto, se mira). En mi casa no hay espejo de cuerpo entero (ríe). Me estás chancando. Los ojos me parecen sexuales, si me miras bien, vamos. Los ojos de tu fotógrafa son lindos (ríe).

¿Quieres ser mamá?Me muero por serlo. Ya te lo dije, hablo muy bien los dos idiomas (alude a chicos y chicas). No ha habido un hombre que me proponga algo serio, todos los que se me han acercado han sido pendejitos, hueveros. Yo sería una perfecta esposa, amante y madre. Claro, de vez en cuando ambos tendremos licencia para divertirnos, pues soy una mujer de mente abierta. Muchos van a decir que soy una loca de mierda, que lo digan, pero seguiré siendo atrevida y sincera. Lo que digo, lo siento.

AUTOFICHA

- Me llamo Sara Giovanna. Tengo 31 años. Viví en Jesús María, en Monterrico y, cuando mis padres se separaron, nos fuimos a la Av. La Paz, en San Miguel, zona brava.

- Toda la vida he hecho lo que me ha dado la gana. Fui pésima en los estudios, y a mucha honra. Los que menos estudiamos es a quienes mejor nos va.

- Estuve como en cinco colegios y de todos me botaron. Era muy traviesa. Cuando le entregaban mi libreta a mi mamá, le decían: "Por favor no le pegue. Es linda (ríe)".