Hacía dos años que Giovanna Gonzales Gonzales (22) vivía atemorizada y bajo amenaza de muerte. Según cuenta, su jefe, Justiniano Porras Vitor (56), no solo la maltrataba física y psicológicamente, sino que, incluso, la ultrajaba sexualmente.
En el colmo de la crueldad, este criminal le prendió fuego en los brazos y en parte del tórax luego de que la encontrara con su enamorado. Esto ocurrió el último domingo en la fábrica de reciclaje de vidrios donde la joven vivía y trabajaba, en Pachacámac.
LOS HECHOSGiovanna Gonzales asegura que Porras la descubrió la noche del sábado junto con su enamorado y que empezó a golpearlos salvajemente. Ambos escaparon por los cerros aledaños y se refugiaron en la casa de una vecina.
Al día siguiente, ella regresó a la fábrica para recoger sus pertenencias, pero –señala–el sujeto la arrastró hasta su carro para golpearla.
"Me cacheteó y luego me echó gasolina junto con toda mi ropa y me prendió fuego", narró.
Pese a las quemaduras, logró huir y lo denunció ante la comisaría de Pachacámac. Después fue trasladada a un centro médico cercano.
La muchacha contó que trabajaba en la fábrica de Porras desde el año 2010, pero que el sujeto no le pagaba. "Él tiene un revólver y siempre me amenazaba. Abusaba de mí y no me dejaba ir", agregó tras manifestar que no tenía a sus familiares cerca para que la ayudaran.
EN HOSPITALLa infortunada fue trasladada al hospital Arzobispo Loayza. La directora del nosocomio, Zarela Solís, informó que presentaba quemaduras de primer y segundo grado en el brazo derecho, muslo derecho y tórax. Asimismo, dijo que recibirá atención psicológica.
TENGA EN CUENTA
- Un día después de la brutal agresión, Justiniano Porras llamó a la joven para ofrecerle disculpas por lo ocurrido. Dijo que está arrepentido.
- El Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables se hará cargo del caso mediante el Centro de Emergencia Mujer.