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Redacción PERÚ21

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Fritz Du Bois,La opinión del directordirector@peru21.com

A tres meses de la votación, todavía tiene un margen en contra que es amplio, y lo que más llama la atención es que ella no parece poner nada de su lado. Así, tenemos que no ha hecho un mea culpa y sigue cometiendo los mismos errores que han llevado a que durante 19 meses consecutivos la hayan desaprobado. Simplemente, no ha cambiado.

Más aún, si vemos en la encuesta las calificaciones sobre la labor de la alcaldesa, un impresionante 49% dice que no ha hecho nada bueno. Esa percepción de inacción no va a ser fácilmente revertida con historias sobre quiénes están realmente detrás de la revocatoria. Las intrigas restan legitimidad a la campaña en contra de Villarán y aumentan las dudas del electorado, pero no logran que los limeños cambien de opinión sobre el pobre desempeño en su trabajo. A este paso, el éxito de la revocatoria parecería algo casi asegurado.

Por ello, debería de hacer un esfuerzo más serio por tratar de mejorar su gestión. Un ejemplo claro es el probable incremento en el pasaje del Metropolitano. Es increíble cómo la municipalidad recién reaccionó luego de que este fuera anunciado, pese a formar parte del grupo que lo había acordado. Incluso, si el mecanismo de fijación de la tarifa por los concesionarios es malo, entonces debieron haber renegociado los contratos cuando entraron hace dos años.

De otro lado, cerrar un tramo de la Costa Verde justo cuando empieza el verano es una excelente manera de asegurar el malestar de los ciudadanos. En la municipalidad parecen tener un problema de estacionalidad. Seguro que está programado cerrar la Prialé cuando la gente empiece a ir a Chaclacayo. En todo caso, la alcaldesa tiene que ponerse las pilas si quiere evitar que su mandato sea revocado.