Pinochet usaba canales diplomáticos para reglaje

SANTIAGO (EFE).– La policía secreta de Augusto Pinochet –gobernante de facto de Chile de 1973 a 1990– utilizó los canales diplomáticos de la Cancillería chilena para recabar información sobre supuestos detenidos desaparecidos, sindicalistas en el exterior y la muerte de 119 opositores.

Así se desprende de documentos hasta ahora inéditos, los cuales revelan la forma en que actuaba la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA) para obtener y manejar información a través del Ministerio de Relaciones Exteriores y sus legaciones en otros países.

Algunos de estos documentos se refieren a la llamada Operación Colombo, un montaje organizado en 1975 para encubrir la desaparición de militantes de izquierda de quienes se dijo que habían muerto en purgas internas.

Para ello, la dictadura contó con la complicidad de algunos medios chilenos que reprodujeron informaciones divulgadas por las revistas Lea, en Argentina, y Novo O'Día, en Brasil, en la que, según se supo después, fue la única edición de ambas publicaciones.

TAMBIÉN A PERIODISTASAsimismo, los documentos revelan que la policía secreta siguió y vigiló a cientos de corresponsales extranjeros. En un extenso listado realizado el 2 de noviembre de 1976 figuran periodistas de la agencia AFP, Ansa, y la BBC así como de los diarios Le Monde y The New York Times.

Además, las embajadas chilenas estaban obligadas a remitir copias periódicas de artículos, columnas o reportajes sobre Chile y en especial sobre las violaciones de los derechos humanos.

En tanto, el ministro de Defensa chileno, Andrés Allamand, anunció que entregará a la justicia todos los documentos secretos en caso se compruebe su existencia.

TENGA EN CUENTA

- Los textos sacados a la luz esta semana revelan la estrecha colaboración entre los ministros del régimen militar de Augusto Pinochet y los cuerpos represivos.

- Las operaciones fueron realizadas dentro y fuera de Chile, incluyendo tres ataques con explosivos en Italia, Argentina y EE.UU.

- Durante la dictadura militar chilena, unas 35 mil personas fueron desaparecidas, ejecutadas o víctimas de tortura.