En una audiencia pública organizada por la Municipalidad Provincial de Pasco, las autoridades y los pobladores reiteraron su rechazo al traslado de la ciudad y exigieron al Gobierno que ejecute obras de agua y desagüe. El alcalde Jhoni Ventura dijo que la localidad ya bordea los 100 mil habitantes, quienes reciben el suministro de agua no potabilizada solo dos o tres veces por semana y durante una o dos horas, lo cual afecta su salud.