"Se estima que mientras más tiempo una mujer amamante a su hijo, mayor es la protección contra cáncer de mama", asegura Roly Hilario, especialista del Centro de Ginecología Preventiva Oncogyn. Esto se debe a que, durante la lactancia, ocurre una mayor producción de las hormonas oxitocina y prolactina, las cuales son responsables de que las glándulas mamarias consigan una madurez celular, lo que, a su vez, disminuye notablemente el riesgo de padecer cáncer mamario antes de la menopausia. Hilario, además, considera que la prevención es una herramienta vital. En tal sentido, las mujeres menores de 40 años deberían someterse a una ecografía mamaria una vez al año, mientras que las mayores de 40 deberían realizarse anualmente una mamografía.