FUEGO ARRASÓ CON TODO. La densa humareda y las llamas se veían a 15 kilómetros de distancia. (Rodrigo Rodrich/USI)
FUEGO ARRASÓ CON TODO. La densa humareda y las llamas se veían a 15 kilómetros de distancia. (Rodrigo Rodrich/USI)

Redacción PERÚ21

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Una feria navideña instalada en medio de la calle impidió ayer que los bomberos llegaran a tiempo para sofocar el dantesco incendio que se inició por la explosión de una cocina artesanal de leña en la calle Blasco Núñez, en el distrito de Belén. El resultado: unas 200 viviendas de madera convertidas en cenizas y más de 1,300 personas damnificadas.

El general PNP José Céspedes Aguirre, titular de la V Dirección Territorial Policial, informó que el fuego consumió, en menos de tres horas, las viviendas de cerca de dos cuadras del sector 7 de la zona de El Porvenir. Al lugar se trasladaron cinco unidades de bomberos y efectivos de la Policía con la finalidad de brindar el apoyo necesario. Sin embargo, también se presentaron problemas con el suministro de agua.

"No había agua, los pobladores tuvieron que ayudar con baldes con agua", manifestó el vicecomandante de la Compañía de Bomberos de Loreto, Rodolfo Arévalo, quien dijo que, además, los propios vecinos tuvieron que utilizar tierra para lanzarla al fuego y evitar que las llamas se extendieran.

Arévalo indicó que, en medio de la tragedia, la demora de los bomberos en llegar al lugar causó la ira de los moradores, que agredieron a los hombres de rojo. La situación fue aprovechada por delincuentes que comenzaron a saquear las pocas pertenencias que los damnificados iban salvando.

DATO

- Según Defensa Civil, 17 personas tuvieron que ser trasladadas a hospitales de la zona debido a que inhalaron humo y fueron afectadas por el calor.