Además de los riesgos ya conocidos, el hábito de fumar tiene un impacto negativo en la vista. Esto se debe a que el humo del tabaco contiene sustancias tóxicas que pueden llegar a los ojos a través del sistema sanguíneo. "Los estudios indican que el riesgo de padecer degeneración macular es cuatro veces mayor en las personas fumadoras", asegura Verónica Talavera, directora ejecutiva de la Clínica de Ojos Opeluce. "No solo eso, las personas que fumaron en el pasado también están predispuestas a padecer esta enfermedad, ya que el riesgo persiste hasta veinte años luego de haber dejado el cigarrillo", agrega la especialista. Otra razón más para no fumar.