Los siete incendios forestales registrados en los últimos días en Áncash arrasaron más de 800 hectáreas de bosques y pastizales y, además de devastar la biodiversidad del lugar, afectaron la zona paisajística de importantes áreas naturales, como la Cordillera de Huayhuash y el propio Parque Nacional del Huascarán.
"La cordillera, los nevados y las lagunas formaban un atractivo paisajístico, pero ahora luce como un manto negro, lo que afecta el turismo", dijo a RPP el promotor turístico Álex Milla Cury, quien pidió realizar una limpieza de la zona dañada para recuperar su atractivo.
Sin embargo, Hugo Carrillo, administrador técnico y forestal y de fauna silvestre de Áncash, señaló a Perú21 que la recuperación de todo lo perdido no será tan fácil. "Los pajonales se pueden rehabilitar con las lluvias, y los bosques afectados, con plantaciones, pero recuperar el material ecológico y de flora y fauna perdido no es tan sencillo. Se necesitan especialistas y, sobre todo, presupuesto, que es lo que no tenemos", indicó.
Carrillo advirtió que debido al clima soleado y seco, y a la persistente y equivocada práctica de los pobladores de quemar sus cosechas, se podrían registrar nuevas emergencias en los próximos días.
TENGA EN CUENTA
- La Administración Forestal y de Fauna Silvestre de Áncash ha elaborado 14 spots en castellano y en quechua para educar a los pobladores sobre las consecuencias de la quema de sus cosechas, a fin de evitar esa práctica y nuevos incendios forestales.