Dirigentes Gregorio Santos y Wilfredo Saavedra se dirigen a sus seguidores en la Plaza de Armas de Cajamarca. (Rafael Cornejo)
Dirigentes Gregorio Santos y Wilfredo Saavedra se dirigen a sus seguidores en la Plaza de Armas de Cajamarca. (Rafael Cornejo)

Redacción PERÚ21

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José ClementeEnviado especial a Cajamarca

Los organizadores del paro indefinido de la región Cajamarca, que ayer cumplió su primer día, en protesta contra el proyecto minero Conga, tuvieron relativo éxito.

Ante la escasa convocatoria, una turba de antimineros la emprendió contra los periodistas que realizaban la cobertura informativa de dicha actividad. Su delito: enviar notas y datos sobre la pobre concurrencia y los vacíos que eran evidentes en la Plaza de Armas, donde confluyeron diversas bases de apoyo.

Lo lamentable de ello fue que el exsacerdote Marco Arana, presidente del Movimiento Tierra y Libertad, se quejó de la forma como los enviados especiales de los principales medios informaban sobre el paro.

"RPP al servicio de las mineras: media plaza está llena. Qué pena da la prensa mermelera, provocadora e irrespetuosa", escribió Arana en su cuenta de Twitter.

Ello bastó para que, informada del hecho, una turba atacara a periodistas de Willax TV, Radioprogramas, América Tv y Panamericana Televisión.

"Me atacaron y me golpearon en la cara porque se molestaron por mis preguntas al padre Arana, sobre su papel frente a las protestas en Espinar, en la que se negó a dialogar con la minera Xstrata Tintaya", dijo a Perú21 el reportero Fernando Lino, de Willax.

Igualmente, la guardia de Gregorio Santos, compuesta también por ronderos, atacó a los periodistas pateándolos.

ENFRENTAMIENTOSSin embargo, "el paro masivo" prometido por los organizadores no tuvo el eco esperado. La ciudad amaneció con el aeropuerto Armando Revoredo en plenas funciones, las tiendas comerciales abiertas, los servicios de taxis y de mototaxis estuvieron en circulación, al igual que las instituciones públicas que atendieron, aunque con las puertas cerradas. La excepción fue en los colegios, donde las clases se suspendieron porque los profesores se plegaron al paro.

Finalmente, cerca de 8 mil personas llegaron hasta la Plaza de Armas, donde Gregorio Santos y los dirigentes Wilfredo Saavedra, Marco Arana e Ydelso Hernández se dirigieron a la población.

Santos le exigió al presidente Ollanta Humala que cumpla con aplicar "una nueva Constitución porque también fue su promesa de campaña. Queremos una nueva Constitución, y si hay que recoger firmas, lo haremos", afirmó.

Por la noche, al cierre de esta edición, la violencia recrudeció. En la plazuela Bolognesi se registraron enfrentamientos. Un piquete de manifestantes intentó ocupar la vía pública instalando ollas comunes. El saldo de las protestas dejó cuatro heridos y siete detenidos, uno de ellos con arma de fuego, reportó la Dirección Territorial de la Policía.

DATOS

- En el programa Jaque Mate, el periodista cajamarquino Henry Horna denunció que varios empresarios de esa región son amenazados para que entreguen "cupos de guerra" a los grupos radicales que intentan desatar la violencia.

- Refirió que los radicales exigieron a los gerentes de una cadena de supermercados que opera en Cajamarca la entrega de 10 mil raciones alimenticias para los próximos tres días.

- El presidente del Poder Judicial, el fiscal de la Nación y los ministros de Justicia y del Interior se reunieron para coordinar acciones en caso se produzcan delitos en las zonas de conflicto.