La felicidad ja, ja

Guido Lombardi,Opina.21glombardi@peru21.com

No necesitamos recurrir a explicaciones de psicología social, vinculadas a niveles de autoestima históricamente bajos, para comprender el porqué. Basta con echar una mirada a las noticias del día (de cualquier día) para comprender los resultados de esa investigación. Las de ayer, por ejemplo. Narcosenderistas secuestran a operarios de Camisea y exigen rescate de 10 millones de dólares (Cusco). Continúan los esfuerzos por rescatar a los nueve trabajadores atrapados en el socavón de una mina informal (Ica). En los dos primeros meses del año se registraron seis mil casos de violencia en el hogar, 700 de los agresores eran reincidentes (Lima). Pandilleros asesinan a Eduardo Ramos, de 19 años, para robarle su celular (San Juan de Lurigancho). Veintisiete años después de producida la masacre de Accomarca, el exoficial del Ejército Telmo Hurtado reconoce la autoría de 31 de las 69 muertes de ese poblado ayacuchano señalando que cumplía órdenes superiores (Lima). Serán reubicados –aun contra su voluntad– los dos mil quinientos damnificados por los huaicos del último fin de semana (Chosica). El Consejo Supremo de Justicia Militar Policial ratifica sentencia de prisión para el general PNP Alberto Jordán por incumplir la orden de desalojar la turba que bloqueaba el puente Montalvo (Moquegua). El Ministerio Público descarta el suicidio en el caso del mayor de la FAP Jorge Olivera Santa Cruz, quien investigaba un caso de contrabando a gran escala en su institución; la investigación no encuentra responsables (Lima).

En estas circunstancias, resulta difícil aceptar que "la felicidad es una capacidad personal que debe ejercitarse diariamente y que se alcanza de forma plena al darse a los demás de manera altruista", como sostiene M. Ricard, asesor y traductor del Dalai Lama.