La fallecida cantante británica Amy Winehouse dejó una herencia de US$4.7 millones que será destinada a sus progenitores Mitch y Janis porque, como se sabe, la artista no redactó un testamento antes de morir.
Según el diario The Sun, Winehouse tenía un patrimonio valorizado en US$6.7 millones antes de pagar deudas pendientes e impuestos.