Los restos del tripulante peruano Tomás Costilla Mendoza (49) –quien murió de hipotermia luego de que el crucero Costa Concordia naufragara en mar italiano– llegaron anoche al aeropuerto Jorge Chávez.
Fue recibido entre muestras de dolor por sus familiares, quienes lo llevarán hoy hasta su natal Trujillo, donde será enterrado.
El joven trabajaba como supervisor de limpieza desde hace 17 años en la empresa Costa Cruceros, propietaria de la embarcación siniestrada.
NI RASTRO DE ELLAPor otro lado, el cónsul de Perú en Florencia, Manuel Veramendi, indicó que es muy difícil hallar pronto el cuerpo de la peruana Érika Soria, debido a que saltó del barco cuando ocurrió la tragedia.