Mercedes Aráoz,Al.mercadomaraoz@peru21.com
La Cumbre del ASPA, después de dos años de suspensión, y la programación en Lima nuevamente del APEC, nos llenan de optimismo. Perú definió en el último quinquenio una ruta de integración al mundo buscando ser un lugar atractivo a la inversión privada, poniéndole énfasis a un comercio de bienes y servicios en un marco de apertura unilateral y multilateral que permite aumentar la competitividad de nuestros productos. La búsqueda de socios entre los nuevos países emergentes, sin perder de vista a los mercados tradicionales de comercio, es una estrategia que nos permite tener liderazgo en la región. Nuestra asociación en el marco del Acuerdo del Pacífico y nuestra temprana presencia en el Acuerdo Trans-Pacífico también nos aseguran escala y complementariedad para ubicarnos en las cadenas de valor globales. Es el momento entonces de potenciar esta presencia con políticas de desarrollo productivo y reducción de la informalidad para realmente potenciar los beneficios de este esfuerzo en el ciudadano común con más empleo digno.