Salud21: Miopía en niños crece por uso de pantallas. (Getty)
Salud21: Miopía en niños crece por uso de pantallas. (Getty)

¿Sabía que la luz azul de las computadoras y de los aparatos inteligentes puede quitar el sueño a las personas? Pero no solo eso, también puede afectar la salud visual y causar altas y ojo seco, sobre todo entre los niños y adolescentes en etapa de desarrollo.

La advertencia fue hecha por la oftalmopediatra Fabiola Quezada, quien dijo a Perú21 que la cantidad de horas que los menores pasan frente a pantallas de celulares, tablets o videojuegos no solo está adelantando la edad de la miopía, sino también aumentando las graduaciones de los niños.

La experta de Oftalmosalud explicó que los ojos se encargan de procesar la luz para transformarla en un impulso eléctrico y formar una imagen en el cerebro. Sin embargo, refirió que si se recibe una luz excesiva, se podría producir un “acúmulo del procesamiento visual en la zona central de la retina”, ocasionando que la persona vea imágenes distorsionadas y tenga “fatiga visual”.

Quezada explicó que, aunque las pantallas generan una luz azul que no es nociva para el ser humano, pues,por el contrario, favorece el crecimiento, la regulación de las hormonas y el sueño-vigilia, esta debe disminuir en la noche para favorecer el descanso. “No obstante, en el caso de los niños expuestos a pantallas la mayor parte del día, el cerebro se confunde y en la noche piensa que es de día. Por eso, aunque es muy tarde, el niño sigue activo, no duerme ni logra el sueño profundo, lo que impide la liberación de la hormona del crecimiento”.

Pero no solo eso. Al estar la mayor parte del día pegados a los videojuegos o al celular y en espacios cerrados los niños hacen una especie de “zoom” para enfocar en las imágenes cercanas, disminuyendo el pestañeo y causando el ojo seco. Esto, además, hace que el músculo trabaje por tiempo prolongado, contrayéndose y dando lugar al “espasmo de acomodación”. Todo eso ocasiona que los niños no puedan ver claro de lejos y tengan síntomas como pesadez, dolor en los párpados, escozor, irritación e incluso dolor de cabeza.

Quezada advirtió que por esta situación los niños pequeños ya están presentando miopías con medidas que aumentan anualmente entre 0.5, 1.5 o 1.75. “Esto es preocupante, pues con esa escala de crecimiento, en 10 años un menor podría alcanzar medidas superiores a los 5 o 6 dioptrías y corre el riesgo de desarrollar en el futuro glaucoma y cataratas o patologías que pueden llevar a la pérdida de visión”, alertó.

Para prevenir esta situación, la especialista recomendó llevar a los niños a controles preventivos cada seis meses y ejercitar su visión de lejos, haciendo actividades al aire libre tres veces por semana. Asimismo, sugirió disminuir lo más posible la exposición de los menores a las pantallas, sobre todo en la noche, y que descansen 15 minutos por cada dos horas de uso de la visión cercana.

“Los padres con miopía deben recordar que tienen 50% más posibilidades de que sus hijos desarrollen miopías y, si los menores se exponen muchas horas a pantallas, la posibilidad ser miope aumentará 30% más, es decir que ese niño o adolescente tendrá el 80% de posibilidad de ser miope”, aseveró.

TAGS RELACIONADOS