Obesidad: ¿cómo conocer los síntomas?

Según la encuesta ENDES, la obesidad afecta al 69.9% de la población adulta peruana. Situación que probablemente empeoró durante el confinamiento decretado por la pandemia del COVID-19, y como sucedió en el resto del mundo en que la población subió entre 3 a 3.5kg en promedio, debido probablemente al mayor consumo de alimentos procesados, al sedentarismo, ansiedad, entre otros factores. Cada segunda semana de octubre se conmemora la Lucha contra esta condición.

La obesidad es una enfermedad crónica, progresiva y muchas veces irreversible, causante directo del 5% de muertes en el mundo y se considera el factor de riesgo número uno de muchas enfermedades comunes como diabetes, hipertensión, enfermedades cardiovasculares, osteomusculares, varios tipos de cáncer y problemas emocionales.

Los factores causales de obesidad son: Genéticos, como tener familiares obesos; Medioambientales que no faciliten el consumo de alimentos saludables o la actividad física y Neuroconductuales donde las emociones negativas y positivas invitan al consumo de alimentos.

“La obesidad tiene muchos rostros y ataca a niños, gestantes, adultos y ancianos y debemos saber clasificar el tipo de paciente que tenemos al frente para buscar la solución de su problema médico: algunas personas consumen alimentos como respuesta a problemas emocionales y otras se suben de peso por exceso de sedentarismo, por ejemplo, aunque muchos tienen combinación de diferentes factores, de tal forma que con el estilo de vida moderno, más la mitad de la población mundial padece obesidad o sobrepeso”, señala el Dr. Darío Bardales, médico endocrinólogo.

Debido a su alta prevalencia, el Dr. Bardales advierte que la obesidad y sobrepeso son un problema de salud pública en nuestro país y aunque son asintomáticos al inicio, podrían dar algunos síntomas:

• Cansancio y dificultad en el desarrollo de tareas cotidianas.
• Hinchazón de piernas
• Síndrome de apnea de sueño: caracterizado por ronquidos y amanecer cansado.
• Complicaciones metabólicas: diabetes, colesterol, triglicéridos, ácido, hígado graso etc.
• Hipertensión arterial: que es más difícil de tratar a mayor peso. Problemas con las articulaciones: Sobre todo Cintura (lumbalgia), caderas, rodillas y tobillos.
• Mayor frecuencia litiasis biliar, litiasis renal, reflujo gástrico y hernia de hiato.
• Depresión, ansiedad

El especialista indica que existe una forma práctica de detectar si tenemos una buena relación entre nuestra talla y peso en adultos y es que si medimos 1.60 debemos pesar aproximadamente 60 Kg más menos 5 kg, lo mismo si medimos 1.70 cm deberíamos pesar 70 kg.

En ese marco consideró fundamental la prevención que debe realizarse lo más temprano posible desde la niñez, incluso desde la gestación prevenir ganar peso, practicar actividad física regular, evitar estar sentado mucho tiempo y cada 30 min realizar una actividad, alimentación equilibrada y dormir en cantidad, calidad suficiente, factores que influyen en nuestro peso corporal.

Dato

• Una vez instalada la enfermedad tiende a perpetuarse y mientras más avance será más difícil tratarla, por eso es necesario acudir al médico para realizar los exámenes correspondientes y llevar un tratamiento en caso lo requiera, finalizó el galeno.

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