La apnea del sueño, si no es tratado, puede aumentar el riesgo de enfermedades cardiovasculares, accidentes cerebrovasculares, puede afectar el control de la diabetes, incrementar el riesgo de obesidad y aparte, generar problemas en las funciones diarias, por ejemplo, como resultado de una mala noche de sueño puede sentirse muy cansado, quedarse dormido mientras maneja o en el trabajo, problemas de memoria, dolor de cabeza, despertar con irritabilidad.