Que la sea la capital de la cocina peruana parece un sueño ambicioso, pero no imposible. Raúl Modenesi, dueño y chef del , asoma entre cuadros de Cherman, en la esquina más patriótica de su espacio gastronómico, con un espectacular rocoto relleno, causitas variopintas, de pulpo y lomo saltado. La especialidad de la casa es una quinua roja que lleva palta, tomates confitados, langostinos al grill y reducción de maracuyá.

No es la primera vez que como en este lugar, y la experiencia siempre ha sido grata. Desconocía la historia y los propósitos de Modenesi, un aventurero gastronómico. Todo empezó hace cuatro años a partir de una necesidad de las agencias de viaje por un espacio netamente peruano con capacidad para recibir a más de treinta personas.

El lugar se inventó y se buscó que respirara pura peruanidad. O mejor dicho, que sea bien limeño, en la carta y en el decorado. Además de Cherman, el segundo ambiente es obra de Martín Yépez, conocido como Lacraza. Lo que se tiene no es una Lima antigua. Se ha levantado una Lima 2018, donde se come un buen ají de gallina sin dejar atrás la compleja coyuntura política, la misma que indigna y que a veces hasta risa da, comenta Modenesi, feliz con lo que ha conseguido.

El edificio, frente a la plaza San Martín, ha sido remodelado sin perder su esencia y tiene una propuesta que en las noches incluye anticuchos, cocteles, cervezas artesanales, salsa y fiesta.

DATOS 
-Se encuentra en la Av. Nicolás de Piérola 942, Cercado de Lima
- La atención es de lunes a sábado.