Las baterías de los smartphones actuales no llegan al final del día. Y es que con tantas aplicaciones que usamos a diario y la energía que se necesita para hacerlas funcionar, la batería se acaba rápidamente.
El debate siempre se ha centrado en las baterías de iones de litio, que son altamente contaminantes y que incluso son muy peligrosas si llegaran a estallar, pero ahora habría una alternativa segura.
La solución serían unas baterías de protones experimentales, que aún tienen por delante un largo camino para ser viables comercialmente. Aunque eso no quita que supongan un avance enorme en el campo del almacenamiento de energía eléctrica.
Según The Guardian, Las baterías de protones ofrecen la misma capacidad que las baterías de litio y sin contaminar, con materiales muy baratos y solo empleando carbón activado y agua.
Investigadores de la Universidad RMIT en Melbourne (Australia) fueron los responsables de desarrollar la batería ecológica con un electrodo de carbono y una célula reversible que se encarga de distribuir los protones de hidrógeno.
La energía proviene del electrodo de carbono que combinado con los protones de hidrógeno provee electricidad. Este sistema de carbono invierte el proceso combinando los protones de hidrógeno con el oxígeno del aire para producir agua, en su interior se produce el ciclo de almacenamiento y combinación de los protones de una manera bastante similar.
Sus creadores aseguran, en el estudio, que esta batería consigue un almacenamiento eficiente, seguro y ecológico dando como resultado un voltaje por celda de 1,2 V.
Aunque tan solo es experimental, ellos afirman que en 5 años esta batería podría salir al mercado, ofreciendo una potencia similar a las baterías de litio.
Esto representa un gran avance, no solo para smatphones, pues se tiene pensado implementarla también en automóviles eléctricos.