La Inteligencia Artificial ha conseguido grandes logros en el mundo del lenguaje, aprendiendo e imitando distintos idiomas (incluso, algunos que no existen más), pero todavía no ha mostrado su máximo potencial. Su nuevo objetivo sería el de llegar a comprender el habla de animales.
Para lograr aprender cualquier idioma, la IA primero estudia una base de datos tomando información. Los intercambios de correos electrónicos, mensajes de texto en línea, etc., así como la comunicación entre personas y los asistentes virtuales (véase Siri o Alexa), son algunos ejemplos claros de lo que compondría esta base de datos. Estas analizan cómo se estructura un texto y cómo se ordenan las palabras unas detrás de otras. A este conjunto lo denominan un “patrón de apariciones”, y las relaciones entre palabras ocurren en un parámetro multidimensional.
Para descifrar el lenguaje animal, la revista Hipertextual señala que sería fácil aplicar estos mismos estudios para la lengua humana. Bastaría con ver si los animales siguen patrones similares a los humanos en la conexión entre unos sonidos y otros.
La idea de este proyecto sería empezar con animales de mayor inteligencia, para observar si sus mentes siguen estructuras similares a los humanos. Por ejemplo, las ballenas poseen un cerebro tres veces más grande que el cerebro de humanos desarrollados, y los elefantes poseen mayor número de neuronas, por lo que no sería sorprendente que se pueda empezar a investigar con ellos.
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Aunque todo esto se encuentra todavía lejos de salir al público, existen ya muchos interesados en investigarlo. La revista WIRED menciona que el proyecto Earth Species Project tendría intenciones de investigar todas las posibles herramientas necesarias para avanzar, y ya se estimula que habría que observar patrones de tonos y repeticiones de sonido para obtener respuestas satisfactorias.