Los gatos son cazadores independientes e inquietos exploradores; por eso, a veces se meten en problemas serios de las que necesitan ayuda para librarse.

Eso le pasó a Marble, un inquieto felino que quedó atrapado durante cuatro días en la chimenea de una casa de Kansas City, en Estados Unidos. 

Taylor Hazley y Tuesday West, sus dueñas, le perdieron el rastro por varios días. Fue Taylor quien escuchó un débil maullido que la dejó preocupada. 

El gato estaba atrapado en la vieja chimenea, sellada con ladrillo grueso y piedra caliza. Alarmados, los vecinos pidieron ayuda al departamento de control de animales y al departamento de bombero.

De inmediato, se les dijo que la operación de rescate sería demasiado delicada tanto para el inquieto minino como para la estructura de la vivienda. 

Hazley estaba muy preocupada al pensar en el destino de su engreído, de modo que un equipo de limpiadores de chimeneas acudió al rescate. Cuando se enteraron de la difícil situación, 'Full Service Chimney' suspendió su día para acudir al rescate. 

"Cuando bajamos la cámara, pudimos determinar la longitud y dónde estaba exactamente ese gato", dijo el técnico Chris Terrones. "Mi temor era que los escombros iban a caer sobre él, pero después de evaluar la situación, decidimos ir de abajo hacia arriba".

Terrones y su tripulación pasaron horas excavando con cuidado en la chimenea, creando un agujero lo suficientemente grande para liberar al gato asustado.

Finalmente, el equipo no cobró por el rescate, pues solo querían ver a la familia recuperada por completo. Hazley y West dijeron que sentían alivio y gratitud por el amable equipo de rescate.

"Estamos extremadamente agradecidos ya que tomaron  la mitad de su dí, para venir y liberar a nuestro gato", dijo Hazley. "Lo hicieron con la amabilidad de sus corazones, y no nos piden nada; es realmente extraordinario".

TAGS RELACIONADOS