Los ciudadanos de Pinar del Río, una ciudad de Cuba ubicada en la zona oeste del país, han sido sorprendidos por el hallazgo de un insólito ser que ha dejado boquiabierta a la comunidad de usuarios de : una tortuga con dos cabezas, seis patas y que están unidas por el caparazón.

El animal fue encontrado por Osvaldo López Romero, un estomatólogo aficionado a la pesca, quien escarbaba la tierra para juntar lombrices junto a su hijo en la orilla de una pequeña represa cerca a su hogar.

Tras el hallazgo, el hombre decidió llevarse al animal y cuidarlo, a pesar de tener muy pocas esperanzas de que sobreviviera. "Pensé que no se salvarían" dijo, pues las tortugas siamesas "no estaban en tiempo de eclosionar". Además, "en la parte de abajo del caparazón tenían una mancha amarilla que parecía la conexión con el huevo", agregó.

Sin embargo, el responsable de las fotografías que se viralizaron en Facebook fue sorprendido por el animal. Y es que luego de algunos días, las tortugas empezaron a alimentarse y a mostrar un estado de salud óptimo.

"Muchas veces los huevos con dos embriones ni siquiera llegan a eclosionar. La probabilidad de supervivencia es casi nula" dijo el médico veterinario de la Empresa Nacional para la Protección de la Flora y la Fauna cubana Ihosvany García Veloz sobre el animal que generó asombro entre los usuarios de Facebook. Hay una especie de "competencia entre ambos individuos", por lo que "se les hace difícil alcanzar el alimento, nadar, o trasladarse por tierra", agregó.

Desde que se hizo el hallazgo, las tortugas siamesas se han convertido en toda una atracción para los ciudadanos de Pinar del Río. "Todos los días venían personas", de forma que "el pueblo entero ha pasado por aquí para verlas", dijo López Romero, señalando que ha recibido propuestas para vender su "mascota", pero afirmó que piensa conservarla hasta que crezca y pueda ser donada a un acuario u otra institución en donde reciba los cuidados apropiados.

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