“Al operar de forma remota y mediante un proveedor externo, también se reduce la interacción física en las organizaciones, lo que ayuda al distanciamiento social”, indica Pablo Prieto, gerente general de la empresa de tecnología TIVIT en Perú. Entre otras ventajas, Prieto asegura que la inversión en la nube puede hacer que las empresas destinen los recursos que dejan de usar en TI a otras áreas más relacionadas con su giro de negocio, como ventas, innovación, marketing, etc.