Redacción PERÚ21

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El congresista (Acción Popular-Frente Amplio) habló fuerte sobre la posibilidad de que el Estado peruano adquiera la refinería , de propiedad de la española Repsol, al considerar "extrañas" las pretensiones del Gobierno.

"Este es un mal negocio. Porque se ha vendido US$4,600 millones el año pasado y ha obtenido utilidades de solo US$25 millones, en cifras que parecen haber sido maquilladas. Es una empresa que no gana nada", refirió.

Agregó que en el tema de La Pampilla "no habría un gran negocio, sino un negociado". "Allí hay algo raro. La Pampilla fue vendida en el gobierno de Alberto Fujimori por US$180 millones y hoy la quieren vender US$2,000 millones. Lo quieren vender a 10 o 12 veces más su valor", detalló.

Por su parte, el legislador fujimorista coincidió en que se trata de un "negocio terrible" pues se prioriza utilizar millones de dólares en esta compra, pese a que ese monto podría usarse, por ejemplo, en resolver el problema penitenciario de todo el país.