Si bien hay más limeños que consideran que Susana Villarán recibió sobornos de la empresa OAS, por encima de los creen que Luis Castañeda también recibió coimas, la diferencia de cifras es mínima. La percepción negativa sobre ambos es muy alta.
En el caso de Villarán, el tema de Odebrecht en el que está implicada ha impactado en ella. Cuando se habla del proyecto Línea Amarilla, que estuvo a cargo de OAS, para los ciudadanos se suma un proceso más de corrupción.
Con Castañeda hay suspicacias porque los limeños consideran que en su última gestión no hizo lo que se esperaba de él. Hay que decir, además, que la gente no distingue pago de sobornos o aportes ilegales. Para los encuestados queda claro que hay personas que llegaron a ser autoridades y se beneficiaron de sus cargos.
De la mano a esto se ve la aprobación al trabajo del equipo especial Lava Jato. Su labor ha permitido que se mejore la imagen del Ministerio Público.