La deflagración de GLP en Villa El Salvador sigue sumando muertos, pero no responsables. Ayer murió Julia Romero Lucas de Miranda, de 65 años, la víctima número 23, pero Osinergmin, entidad estatal encargada de fiscalizar el transporte de gas, no ha tenido reparos en lavarse las manos cada vez que se le recuerda el rol que debía cumplir.
La tragedia ocurrió el último 23 de enero y tan solo siete días después, mientras las familias velaban a sus muertos, Osinergmin firmó una orden de servicio por S/34,400 para que la empresa Otrosí SAC prepare a Daniel Schmerler, presidente del Consejo Directivo de ese organismo, para presentarse ante los medios y defienda ante estos un informe interno que lo limpia de toda responsabilidad. Esta orden fue publicada por primera vez por el periodista Juan Pablo León.
El informe fue publicado el 31 de enero pasado y concluye que la desgracia se debió al mal estado de la pista y a que el camión de la empresa Transgas LP mantenía abierta una válvula de su tanque interno. Ni una palabra sobre el trabajo de fiscalización que debió realizar Osinergmin.
Ese mismo día por la mañana, antes de que Schmerler diera la cara ante dos medios, la gerenta general de Otrosí, María Pilar Olaya Guerrero, y el periodista Augusto Álvarez Rodrich ingresaron a la sede de Osinergmin para cumplir con el trabajo de media training, según el registro de visitas de la entidad. Este diario intentó contactarse con Álvarez Rodrich, pero no contestó nuestras llamadas ni mensajes. No obstante, en una carta al canal Latina, que publicó ayer en su cuenta de Twitter, el periodista reconoció que fue contratado por la empresa Otrosí para la capacitación.
En comunicación con Perú21, Osinergmin también reconoció que el servicio tenía como objetivo exponer los resultados del referido informe. “Ese servicio estaba programado desde el año pasado, pero se tuvo que adelantar para alinear los mensajes con el equipo técnico para que los resultados de la investigación puedan ser claramente informados a la población”, señalaron. Además, insistieron en que su supervisión en el sector hidrocarburos “no ha disminuido; por el contrario, se han incrementado año tras año”.
La secretaria general del sindicato de trabajadores de Osinergmin, Pilar Merino, discrepa completamente con esta posición. Ella denuncia que su entidad ha disminuido su presupuesto asignado para la supervisión. “Se ha acreditado la disminución de las empresas supervisoras que implica menos fiscalizadores”, explicó a este diario.
“Desde que la empresa (Transgas) tuvo ficha de registro hasta que ocurrió el accidente tuvimos tiempo suficiente para que la fiscalización determine que esa unidad no contaba con las condiciones de seguridad”, aseguró.
La orden de servicio señala que se pagó al contado los S/34,400 a Otrosí, pero Osinergmin asegura que ese dinero será desembolsado luego de un segundo taller “a los técnicos del interior del país”. El Portal de Transparencia de Osinergmin no permite acceder a las “órdenes de servicio” a pesar de ser públicas.